Danilo Santos
Politólogo
desantos.salazar@gmail.com
Tanta tontería en el ambiente político del país, las fiestas y la cuesta de enero, son elementos fundamentales para que se pierdan de vista los temas de fondo y se consumen los planes de quienes nos mal gobiernan y mal defienden a “la patria”.
La derrota de la propuesta oficialista para la elección de Junta Directiva en el Congreso de la República replanteó a los cabezas de serie como lo más importante a elegir; eso del caudillismo lo tenemos bien metido en el ADN político. No cambia el plan sino la estrategia, lo más probable es que Manuel Conde tenga la bendición del Palacio de La Loba y sea más cómodo para el presidente Morales aceptar a un “negociador” en lugar de sus alfiles propios y asimilados.
Los procesos políticos que se vienen no se pueden tomar a la ligera porque tendrán que ver directamente con temas delicadísimos para la gobernabilidad y viabilidad del país: la revisión del mandato de la CICIG, la elección de Fiscal General del MP, por ejemplo. No pueden darse el lujo de dejar cabos sueltos. En cuanto a la CICIG, será la ONU quien, junto al gobierno, revise lo del mandato, eso no sucede de la noche a la mañana y, las elecciones están a la vuelta de la esquina. Les preocupa en demasía llegar a la próxima contienda electoral con un Iván Velásquez observando. La elección de Fiscal es este año, y les urge un “patriota” que esté dispuesto a “derrotar” la intromisión extranjera y defender la “soberanía”. Es decir, romper la alianza CICIG/MP.
Han sido exitosos en hacer creer a la población que luchan por la patria; la retórica de la selectividad y demás les funcionó. Lograron de momento gestionar la indignación por la corrupción y la impunidad.
La Embajada también observa, no se moja de momento, Arreaga con su modo “suavecito” les puede dar una sorpresa (miren al Juez Gálvez), en todo caso, lo que importa es que haya un gobierno viable para ejecutar el Plan para la Prosperidad. Acciones como lo de cambiar la sede diplomática de Guatemala en Israel, siguiendo el ejemplo del Norte, pues no pesará mucho a la hora de tomar decisiones por parte del gobierno gringo. No somos China. Rusia o Alemania. Les vendría bien entender nuestro peso político en el concierto de las naciones…
En fin, todo está listo para batallas políticas por el control del Estado. Lo que suceda este 2018 definirá en gran medida el futuro del país.
Y bueno, trampas “caza bobos” faltan muchas por ver todavía, hasta causa curiosidad hasta dónde llegarán y hasta dónde creen que pueden llegar, y más importante aún: hasta dónde la ciudadanía les dejaremos llegar. Así las cosas y sabiendo que el parteaguas impuesto son las próximas elecciones generales, es hora de que la Bancada por la Transparencia se transforme en otra cosa más fuerte, que surjan alianzas conscientes de lo que el país se juega. No tengan pena si son de izquierda, social demócratas, progresistas o de centro; la Embajada acepta lo que sea que le funcione… incluso a una alianza conservadora y retrograda como la que nos gobierna actualmente.
