Edith González

Tu corazón le da poder a tu cuerpo. Te permite amar, reír y vivir. ¡Empodérate  de tu vida, has los cambios  que marquen la diferencia!  ¡Ama a tu corazón!

Cada mañana antes de que el sol asome, muchos niños y niñas son llevados por sus padres por largos trayectos  desde distintos puntos  del país hasta  un costado del Hospital Roosevelt, en donde ahora se encuentra UNICAR, la Unidad de Cirugía Cardiovascular.

El primer intento de  iniciar una unidad  en enfermedades del corazón, con sede en el Hospital Roosevelt,  dirigida desde entonces  por el doctor José Raúl Cruz Molina, Médico y Cirujano Cardiovascular la llevó a cabo el presidente Kjell Laugerud, en 1976.

Luego en 1984 el presidente Mejía Víctores inició la construcción de un edificio independiente. Y en 1994 Ramiro De León Carpio autorizó la creación y funcionamiento de UNICAR. En 1997 el doctor Aldo Castañeda da vida al área de pediatría, la que dirige hasta la fecha.

Los pacientes adultos que igualmente llegan de todas partes del territorio nacional son atendidos en UNICAR por médicos especialistas, con modernos equipos para evaluar, diagnosticar y tratar las dolencias de ese enorme músculo llamado corazón que al latir nos da vida.

La Federación Mundial del Corazón, la OMS y UNESCO designaron el 29 de septiembre del año 2000 como el primer Día Mundial del Corazón. Este año bajo el lema: Comparte tu poder, se enfoca en la creación de entornos saludables, para reducir los factores de riesgo asociados a las enfermedades cardiovasculares, porque el mundo debe recordar que si queremos vivir por largo tiempo sanos además de amar debemos hacer ejercicio, comer saludable, no fumar, controlar el colesterol y la presión arterial.

Si somos constantes y practicamos ejercicio al menos cuatro horas semanales, obtendremos los beneficios cardiovasculares del deporte que son muchos. Sin embargo, es posible que una tarde de entrenamiento nos pase factura en caso de que no tomemos ciertas precauciones.

Una nueva técnica, la ‘respiración por coherencia cardiaca’, permite aliviar el estrés y, de paso, prevenir las enfermedades cardiovasculares controlando las aceleraciones y desaceleraciones del corazón. Se trata de inspirar y espirar de forma voluntaria lentamente para aumentar la amplitud de la frecuencia cardiaca.

Además, está demostrado: quienes viven con una mascota en casa tienen la autoestima más alta, socializan más y sufren menos estrés. Y eso solo es la punta del iceberg. Entre otros beneficios, los animales de compañía ayudan a controlar la presión arterial. Según los últimos estudios, aportan beneficios tanto psicológicos como físicos, tal como expresa la Fundación Española del Corazón.

Claro que si el corazón está sometido a grandes presiones, como una moderna forma de infidelidad o golpe de Estado, la situación se empeora. A propósito, quiero interponer un recurso de amparo, una revocatoria de mandato, una exigencia de renuncia, una solicitud para ser investigado, un antejuicio, retirar la inmunidad y todos los demás términos de moda contra el Presidente porque la lluvia no cesa y ya me enfermé…

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