No cabe duda que la CICIG ha sido el instrumento más destacado de la lucha contra la corrupción, pero no se puede pasar por alto que el Ministerio Público ha jugado un papel ejemplar a partir del 2015 cuando se convirtió en pieza clave al acompañar el esfuerzo por evidenciar el nivel de corrupción a que habíamos llegado en el país. Sin demeritar el trabajo de la Comisión y especialmente del Comisionado, puede decirse que sin la decidida actuación de la fiscal general Thelma Aldana todo hubiera sido muy difícil porque corresponde al Ministerio Público el ejercicio de la acción penal.
Por ello es que hoy se inicia una lucha crucial en el combate a la corrupción, puesto que la elección de Presidente de la Corte Suprema de Justicia es vital en la conformación de la Comisión Postuladora para elegir Fiscal General y así como los poderes ocultos que se han beneficiado por la cooptación del Estado harán hasta lo imposible por conformar una Comisión a su gusto, los ciudadanos que queremos acabar con los vicios que empobrecen al país tenemos que estar vigilantes y ser exigentes para impedir que se concrete el plan de la consolidación de la impunidad y la corrupción, tema en el que cuentan con el gran aliado actual que es nada más y nada menos que el Presidente de la República.
Como ciudadanos preocupados por el futuro del país y por lo que hemos de heredar a nuestros descendientes, debemos comprometernos para actuar a lo largo de todo el proceso sabiendo que de ello depende prácticamente todo, porque si volvemos a tener una fiscalía complaciente con la corrupción, como lo fueron todas las que antecedieron a la de Aldana, pagaremos un alto precio por nuestra indiferencia.
No es exagerado decir que en esta lucha por la Fiscalía General literalmente nos jugamos el todo por el todo, como muy bien lo saben las fuerzas del mal que desde hoy en la Corte Suprema de Justicia mostrarán cómo saben cerrar filas para consolidar el sistema de corrupción e impunidad que de tanto les ha servido. No olvidemos el origen de las Cortes y cómo fueron manoseadas las Comisiones de Postulación por intereses perversos que dieron lugar a ese aparato que tan eficientemente ha servido para entorpecer el avance de la justicia contra los sindicados de corrupción, quienes se frotan las manos de gozo al ver cómo pueden tener un MP dócil justo cuando termine el mandato de la CICIG para recuperar su libertad sin ningún contratiempo.
