Mario Coyoy
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En línea con la publicación de la semana pasada, es importante considerar el impacto que se genera a nivel tributario en la mayoría de las actividades y transacciones que se realizan en las empresas; por lo que es necesario y crucial que la administración evalúe el plan actual de organización, los métodos y procedimientos adoptados, para que se incluyan aquellos elementos que permitan al contribuyente mantener la confianza de estar cumpliendo con todas sus obligaciones tributarias.
Por lo anterior, en la presente publicación compartiremos sobre cómo en cada ciclo de negocios existe un impacto fiscal, y algunas áreas de los ciclos en que las empresas deben enfocarse al establecer el control interno fiscal, adoptando políticas que den confiabilidad tributaria, es decir, que ayuden a garantizar que la función de contribuyente y agente de retención de impuestos, se esté realizando conforme la Ley vigente.
Iniciaremos con el ciclo de tesorería, en el cual algunas de sus principales funciones son la administración del efectivo y las inversiones de la empresa, por lo que entre los posibles impactos tributarios en este ciclo se pueden mencionar el cumplimiento con la normativa de bancarización en las transacciones que realicen las empresas mayores a Q30 mil y el debido cumplimiento en la preparación de conciliaciones bancarias al cierre del período.
Respecto al ciclo de egresos, en el cual se encuentran entre otros temas, las compras, importaciones, adquisición de servicios y el pago de nóminas, algunos de los impactos tributarios a tomar en consideración al momento de establecer un debido control interno fiscal, podemos mencionar el correcto cumplimiento con la documentación de soporte según la legislación vigente para efectos de la deducibilidad del costo o gasto, su relación con el giro del negocio que genera rentas gravadas, la aplicación de las retenciones respectivas, entre otros.
En el ciclo de conversión, en el cual se encuentra principalmente la requisición de materias primas para la producción, la transformación de materias, los inventarios, la depreciación de los activos de la empresa, etc., debe existir un buen método de valuación y control de inventarios, un adecuado proceso documentado de destrucción de inventarios, correcto registro del costo de ventas, entre otros temas.
Finalmente, el ciclo de ingresos, en el cual uno de los principales factores que tiene un impacto fiscal son las ventas de productos y/o servicios prestados por las empresas, y por ende el momento de llevar a cabo la facturación, entrega del producto y/o prestación del servicio, y su registro contable tomando en consideración el método de lo devengado o percibido.
Es importante que toda empresa cuente con un adecuado control interno tributario que cubra cada ciclo del negocio mitigando la generación de posibles exposiciones fiscales, por lo que una vez la compañía ha estudiado y comprendido el impacto fiscal que existe en cada uno de los ciclos de negocio, los siguientes pasos a seguir son el evaluar el estado actual del control interno fiscal de la empresa para posteriormente definir un plan de acción sobre cada posible área de riesgo y finalmente proceder a llevar a cabo la implementación de los controles en la organización y seguimiento a su debida ejecución para mitigar los riesgos fiscales, que en nuestro país y en toda Latinoamérica, está siendo un tema crucial en el mundo empresarial. Que Dios los bendiga.