Cuando no se oye mayor cosa en el país, es cuando, generalmente las peores componendas se están llevando a cabo entre los actores de poder político y sus socios del poder real que, evidentemente, estarán queriendo retomar el control que han perdido en los últimos dos años.
Hace unas semanas se supo por medio de una grabación de una reportera de Nómada que Mario Taracena tenía ya hecho el plan para tomar completo control sobre el Tribunal Supremo Electoral y someter a los magistrados a lo que los políticos ordenen. La verdad, la UNE seguro que entiende lo que es controlar esa entidad ya que se acaba de beneficiar de manera inexplicable tras los ilícitos cometidos en el financiamiento de la campaña presidencial de Sandra Torres, preservando su condición de partido, mientras que otros fueron cancelados por hacer lo mismo.
Viendo que el plan de Taracena junto a Linares Beltranena y Álvaro Arzú pasó como si a nadie le importara un pepino. ¿Qué estarán planeando para la selección de Fiscal General? ¿Cómo se estará partiendo el pastel del Listado Geográfico de obras?
En el Ejecutivo todos en silencio. No se nota más que las críticas a los candados y medidas protransparencia que “impiden la ejecución” de quienes evidentemente no tienen la preparación para ejercer los puestos para los que fueron electos.
Y seguramente que tras bambalinas lo que están enfrentando es la frustración de muchos de los políticos tradicionales que lo único que saben y les interesa es sacarle provecho al Estado y sus recursos, notando ahora que por temor muchos prefieren no hacer nada antes que facilitar los negocios.
Ese silencio en el Ejecutivo sobre la situación general del país no quiere decir que no estén haciendo nada. Algo están tramando ya en las reformas a la Ley de Compras y Contrataciones para meter nuevos goles, entre ellos uno relacionado con TCQ.
Y así debe estar sucediendo con los otros sectores y actores que se han visto amenazados por el destape de casos de corrupción en que parcialmente se han atacado las causas del saqueo del Estado. Decimos que parcialmente ya que no se ha hecho lo mismo contra otros gobiernos y alcaldes como se demuestra con los Colom y Arzú que son el rostro más visible y cercano de la impunidad. ¿Serán peores los Patriotas que los Colom Torres? ¿Será peor Medrano que Arzú? ¿Entonces?
Ante el silencio de la sociedad deberíamos saber que están planeando los actores del poder. Seguro, con algo nos vendrán y tenemos que estar atentos y preparados.
