Edith González
La educación no cambia el mundo, cambia a las personas que van a cambiar el mundo
Paulo Freire
El 19 de mayo de 2008, en El Salvador, la presidenta de Argentina, Cristina Fernández, en presencia del Secretario General Iberoamericano Enrique Iglesias y cerca de 3200 invitados, se inauguró el Congreso Iberoamericano de Educación.
Durante el mismo se aprobó el proyecto Metas Educativas 2021, que contiene una propuesta para el avance de la educación. Los Ministros de Educación firmaron un compromiso de cumplimiento de las Metas Educativas 2021, la educación que queremos para la generación de los bicentenarios.
Sus objetivos compartidos por los países consisten en mejorar la calidad y la equidad en educación, para hacer frente a la pobreza, la desigualdad y favorecer la inclusión social. Se busca emprender con decisión retos comunes aún no resueltos como analfabetismo, deserción escolar, ausencia escolar, bajo rendimiento de alumnos y escasa oferta educativa, llegando a ser tan ambicioso que, además, buscaba que a esto se implementaran los nuevos avances en los campos tecnológicos, incorporando las TIC en un marco de verdadera innovación y desarrollo creativo de la investigación. Todo ello sin dejar de tomar en cuenta las transformaciones sociales acordes a la sociedad actual.
A nueve años de la firma del compromiso educativo nos preguntamos por dónde vamos, porque para 2021 apenas nos quedan cuatro años. Y los guatemaltecos estamos a la espera del cumplimiento de los compromisos con la población, los que no buscan más que dar respuesta positiva a falencias de los estados que por décadas no han sabido o querido atender, pero que se espera ahora, aunque sea por un compromiso internacional se logre, ya que ello permitirá encauzar la vida de los jóvenes de la Generación del Bicentenario de mejor manera, para ser productivos para ellos, sus familias y sus países, pero especialmente personas de bien en busca de la superación profesional y personal para la construcción de una mejor sociedad.
Si bien las protestas por falta de refacción escolar han dejado de escucharse desde la intervención el año anterior del presidente Morales, es penoso y triste escuchar las declaraciones del Ministro de Educación cuando informa que este año no se contratarán más maestros y se conoce que padres de familia junto a sus hijos encerraron a la Directora de un plantel educativo en la biblioteca del establecimiento, a la espera de que les nombren docentes.
Sin docentes no podemos tener educación en la escuela, más que la de los pares, la que seguramente nos llevará a salir a las calles a protestar como lo hicieron las adolescentes de Comercio Dos y provocar situaciones que incluso les lleven a la muerte como en este caso, que sin quitar la responsabilidad del ya imputado, debe ser asumida también por parte del Ministerio de Educación, considerando que conocían del problema y no hicieron por solucionarlo, que los jóvenes estaban en horario de clases, por lo que debían permanecer dentro del plantel y que, además, fueron acompañados por docentes y hasta por un delegado de la Procuraduría de los Derechos Humanos.