Gladys Monterroso
licgla@yahoo.es

“El amor es para el niño como el sol para las flores; no le basta pan: necesita caricias para ser bueno y ser fuerte.” Concepción Arenal

No nos podemos abstraer de nuestra realidad, como país, como grupo, o en lo personal, y si existe un tema que continúa sangrando heridas, es el de las niñas y adolescentes masacradas en un acto de incompetencia total, lo que a su vez, nos permite cuestionar acerca del nombramiento de cualquier funcionario público en el país, tanto los designados a dedo, como los de elección popular, ya que si lo analizamos fríamente también son a dedo, porque cuando el 98% de la población vota por alguien ¿Sabe si llena el perfil para el cargo o no? No, no lo sabe, o sea que somos un país que bien podría ser calificado como el “País del Dedo”.

Resultado, casi nadie llena los requisitos mínimos para el cargo que ostenta, y al 1 por millar, que cumple mínimamente, se le aplaude, vaya paradoja, pero así funcionamos, desde el inicio del problema que trajo como consecuencia un hecho deleznable, como lo es arrancar de tajo la vida de 41 capullos de flor, quisiera, analizar el otro lado de la moneda, como: ¿Por qué estaban en el hogar las niñas y adolescentes?

Leyendo constantes y variadas entrevistas a los familiares, en un alto porcentaje madres, el argumento es recurrente: Eran muy buenas, inteligentes, soñadoras, querían ser alguien más en la vida, y no lo dudo, definitivamente así eran, pero ¿Por qué estaban internadas? Y dolorosamente todas tenían un porqué, pero del cual ellas eran la consecuencia, no la causa, veamos, todas de pronto se volvieron “rebeldes”, huyeron de sus casas o desaparecieron, pero ¿Por qué no podían compartir con su familia?, Porque en todos y cada uno de los casos su familia en algún momento, o por algún motivo les falló, las dejaron solas, las agredieron, o las abandonaron.

En un Estado fallido como el nuestro, en el que las instituciones apenas funcionan, la institución de la familia también se encuentra en graves problemas, la disfuncionalidad de la misma es más que evidente, padres ausentes, maltratadores e incluso violadores, madres ausentes también, calladas, reprimidas, o como en uno de los casos, fallecida, ¿Qué podría hacer por su niña? Pero las demás sí, pero no fue, y como los mencionados, existen infinidad de historias que en algún momento conocemos, pero que el individualismo en el que vivimos, las mismas instituciones, y el contexto no permiten hacer lo que se debiera, en este momento, vivimos la pequeña línea que separa el ser y el deber ser, la que no solamente es desconocida para la gran mayoría, sino que muchas veces es molesta y se hace lo que se quiere no lo que se debe, veamos ¿Cuál es la función del padre en la vida de los hijos? Primero estar, acompañar, guiar, amar y por último proveer, pero ¿Se cumple? No, desafortunadamente, la mayoría de los padres en determinados ambientes sociales, ni siquiera piensa en el significado de su rol en la vida del ser humano que como consecuencia de sus actos vino al mundo.

La familia en la sociedad actual cada vez es menos familia, se ha convertido en un grupo de personas que asumen pobremente su papel, con sus resultados, naturalmente, porque no solamente es notorio, sino patente que hace falta lo más importante: Amor, y la consecuencia de la falta del mismo es rebeldía, falta de comunicación, actualmente también muchas madres abandonan el hogar, pero hogar significa hijos e hijas, el resultado: Niños/as y jóvenes en conflicto con la sociedad, producto de la falta de conciencia de quienes le trajeron al mundo.

Aunque evidentemente, en la familia inicia todo, las instituciones encargadas de brindar el apoyo como parte del Estado a los desvalidos, no cumplen con su labor con la mística que se necesita.

¿Quiénes las mataron? Todos, principiando por la familia, para quienes no fueron lo suficientemente importantes en un momento determinado, y terminando por las instituciones públicas, cuyos funcionarios en la mayoría de los casos, no saben o desconocen de la importancia de la labor que deben realizar.

Artículo anteriorCapturan a uno de los 100 más buscados de El Salvador
Artículo siguienteEl crimen contra Siria