Fernando Mollinedo C.
Si, así como se lee; tiranos son todos aquellos jefes de dependencias que laboran para el Estado (y en lo privado también) imponen reglas y sanciones que no están contempladas en la normativa ordinaria que los empleados deben cumplir bajo la amenaza de ser despedidos. TIRANO: Del latín tyrannus, y éste del griego tÝrannoj. Aplícase a quien abusa de su poder, superioridad o fuerza en cualquier concepto o materia, y también de quien impone ese poder y superioridad en grado extraordinario.
Este fenómeno es de trato diario en otros ministerios, pero en el Mineduc por su condición de “educador” es intolerable que sus empleados abusen y sean abusados por jefes administrativos intolerantes omitiendo la legislación que norma su conducta y la de los empleados.
De plano, la responsabilidad recae también en los empleados cuyo principal deber (en caso sepan leer y escribir) es conocer las leyes, reglamentos, normas, pactos y convenios que regulan sus relaciones de trabajo con el patrón Estado; su ignorancia legal los coloca en situación que les impide reclamar justicia laboral en sus centros de trabajo.
Los Directores de Escuelas e Institutos creen que los maestros de grado y los conserjes son sus esclavos particulares durante la jornada de trabajo; les gritan, prohíben que hablen entre sí en el recreo, humillan y amenazan con rescindir su contrato o “destituirlos”; lo que no hacen con los maestros que les abren la escuela, tocan la campana, tapan sus inasistencias, les prestan dinero o se encargan de la Dirección durante sus frecuentes visitas a la supervisión.
Los maestros ignorantes de sus derechos obedecen, pues no saben que hay una CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE LA REPÚBLICA DE GUATEMALA, LEY DE SERVICIO CIVIL y su REGLAMENTO, LEY DE EDUCACIÓN NACIONAL y PACTOS COLECTIVOS DE CONDICIONES DE TRABAJO que regulan la actividad laboral indicando derechos y obligaciones del patrono y empleados; NO LAS HAN LEÍDO.
Esa ignorancia es común en un alto grado porcentaje de maestros, pues consideran que todo lo saben y pueden de acuerdo a su lógica común, pero su crecimiento personal se estancó desde que principió a trabajar y no se superó culturalmente obedeciendo, incluso las órdenes de los pseudosindicalistas que los lideran.
La prepotencia, abuso, maltrato, desconsideración, ofensas, menosprecio, insultos, desaires, groserías y otras conductas deleznables de los Directores de Escuelas e Institutos, supuestamente amparados por cultivar el temperamento romántico o en alguna ocasión se echaron los tragos con los supervisores educativos, incluso ser amigos de los Directores Departamentales de Educación, mantiene amedrentados a los maestros de grado por su ignorancia de la ley.
Ejemplos de estas conductas los hay por miles en todas las escuelas del país, los Directores se sienten minipatrones de finca y satisfacen su ego para sentirse importantes. ¿Desviación psicológica? No lo sé, porque no soy psicólogo; pero lo que si es cierto es que en algunas escuelas e institutos hay émulos de CORONELES, CORONELAS y GENERALES dirigiendo las actividades educativas. Por supuesto: hay excepciones, o ¿no es cierto?