Roberto Arias

Seguimos shockeados por el impacto mundial negativo debido a que los políticos gringos hicieron que ganara Trump con ese sistema de elecciones presidenciales que implantaron, el que riñe absolutamente con cualquier idea democrática. Se llenan la boca con la palabrita «Democracia», pero su sistema eleccionario es asomo absurdo en el cual el ciudadano común no tiene algo que ver con la verdadera elección presidencial. Esto nos trae al mal recordado caso de Al Gore contra el hijo de Bush – George Bush.

Donald Trump, quien ya sabemos hijo de quién es, desde los inicios de su campaña presidencial arremetió de una manera cobarde en contra de los latinoamericanos utilizando a México como catapulta. Ha patinado sobre la dignidad del pueblo latinoamericano entero diciendo que somos criminales, violadores y narcotraficantes y, ahora que preside uno de los países más poderosos del mundo, se puso más abusivo, soberbio y estúpido.

No cabe duda que la Presidencia de Trump tendrá un enorme impacto en el futuro del sistema comercial multilateral, y también en los acuerdos comerciales bilaterales. Realmente el impacto será global con enorme pérdida para los países más debilitados como Guatemala.

Lo más probable es que cesarán las negociaciones del gran acuerdo de la Asociación Transatlántica para el Comercio y la Inversión, entre Estados Unidos y la Unión Europea. Y ya advirtió que renegociará el Tratado de Libre Comercio de América del Norte.

De acuerdo a despachos de internet: «Lo que acabamos de hacer es una gran cosa para los trabajadores estadounidenses», dijo el lunes el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tras firmar la orden ejecutiva mediante la cual retiraba a su país del Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TPP, por sus siglas en inglés), decisión que tendrá su impacto en varios países latinoamericanos.

La decisión puso fin a la participación de EE. UU. en un ambicioso tratado comercial cuya creación fue impulsada durante siete años por el gobierno del expresidente Barack Obama. Con Estados Unidos, el TPP reunía en su seno a doce países que juntos representaban entorno al 40% del PIB mundial y un mercado de 800 millones de habitantes. En el acuerdo participaron, además, tres países latinoamericanos (México, Perú y Chile), junto a Canadá y a siete naciones de Asia Pacífico: Australia, Japón, Malasia, Vietnam, Brunei, Singapur y Nueva Zelanda. Y el gran ausente entre las potencias económicas del Pacífico es China.»

Estas sandeces demuestran que Donald Trump usa y seguirá utilizando su alta investidura para utilizar al mundo entero como su bacinica privada, al igual que utiliza la Casa Blanca. Pero en el caso de Latinoamérica, creo honestamente que se le debe poner un «hasta aquí» a Trump desde el inicio. Ya es hora de que Latinoamérica despierte y deje de humillarse ante el imperio, mientras éste sigue saqueando los recursos naturales renovables y no renovables de nuestros pueblos.

Mientras dividieron a Centroamérica en los 1800, ellos se unieron en una Federación y crearon Estados Unidos de América.

Artículo anteriorVeremos qué hace el gobierno en el 2017
Artículo siguienteCooperación e intercambio comercial entre India y Guatemala