Juan Francisco Reyes López
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Los ministros hicieron sus presentaciones del año de labores en el orden protocolario, según lo establecido como precedencias en la Ley del Organismo Ejecutivo y demás normas vigentes. Con la información presentada se evidencia las diferencias en ejecución y en calidad de cada uno de ellos.

Destaca lo realizado por el ministro de finanzas quien, complementado en los hechos por el Superintendente de la SAT, señaló que se redujo la brecha fiscal de Q4,000 millones a Q200 millones, lo cual es indudablemente positivo. Señaló así mismo que la ejecución del presupuesto fue de 92.1% y también manifestó que los intereses que el Estado paga por el financiamiento público se redujeron al 4.5% al haber colocado los Bonos de la deuda del Tesoro en Eurobonos, lo que implica una reducción de Q200 millones en el servicio de la deuda pública. En mi opinión, es el Ministro que mejor ejecución tuvo durante el año.

Debe resaltarse lo realizado por el Ministro de Gobernación, cuya gestión ha permitido la reducción de homicidios de pilotos del transporte público y de mujeres; así mismo, ha aumentado el decomiso de cocaína, en lo que todavía no hay ninguna mejora es en el sistema penitenciario que al igual que otros países como Brasil y Honduras está saturado y en pésimas condiciones.

Tanto lo ejecutado e informado por el Ministro de Gobernación debe considerarse positivo, igual que la gestión de Relaciones Exteriores, que ha logrado aumentar los consulados y en cierta forma eficientar las representaciones de las embajadas en el exterior. El ministro puntualizó haber adquirido en propiedad el inmueble que ocupará el Consulado en los Ángeles, Estados Unidos, hecho que debería ser una política permanente y evitar el pago de alquileres que se realizan y que no permiten ningún aumento patrimonial para el Estado de Guatemala.

En un menor grado de calidad debe situarse el Ministerio de Salud, en donde se ha tenido una intensa lucha tratando que exista un abastecimiento adecuado de medicamentos y productos paramédicos en los principales hospitales del país y está esforzándose porque la atención de la salud sea preventiva y los puestos de salud sean los que reciban y resuelvan la mayoría de enfermedades, logrando para la población una atención inmediata y mejor.

Debe considerarse y reconocerse la labor del Ministerio de Educación, quien alcanzó 177 días de clases promedio, cifra todavía insuficiente, pero menos mala que la de años anteriores.

Como de regular se tiene que considerar la labor realizada por los ministerios de Agricultura, Medio Ambiente y Cultura y Deportes. Este último está encabezado por un ministro preparado, pero que no logra cuajar en las prioridades que le corresponden al ministerio, donde la recuperación y mantenimiento del Palacio Nacional de la Cultura tiene que ser una de las primeras prioridades, igual que lograr que se realicen exposiciones financiadas por países amigos en Europa y en Asia, como se logró en el gobierno que presidió Alfonso Portillo y el suscrito Juan Francisco Reyes.

Los ministerios menos exitosos en su gestión sin duda alguna fueron el de Trabajo y el de Comunicaciones, Infraestructura y Vivienda; así como el de Economía que comparativamente hablando están en la calle de la amargura. De los tres, el Ministerio de Economía mejor no debería de existir.

¡Guatemala es primero!

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