Oscar Clemente Marroquín
ocmarroq@lahora.com.gt

No recuerdo dónde ni cómo escuché por vez primera la expresión que hoy uso para titular mi columna, pero siempre me pareció totalmente expresiva para denotar el hartazgo y cansancio cuando alguien trata de propasarse y le quiere ver a uno la cara de mula. Al conocer ayer de la denuncia que hizo el juez Carlos Ruano contra la magistrada Blanca Stalling, y aun antes de saber de las acciones de la CICIG y el MP relacionadas con la forma en que se cooptaron las Comisiones de Postulación, pensé que dada la podredumbre que hay en el poder judicial, en el Congreso de la República y en el Ejecutivo, los ciudadanos tenemos que asumir nuestro papel y decirles, justamente, a la mierda los pastores que la Pascua ya pasó.

Y es que no queda otro remedio porque todos los pícaros aconchabados y protegidos por la institucionalidad se hacen fuertes sabiendo que se tienen que cuidar unos a otros. Los magistrados tratan con pinzas los antejuicios contra los diputados porque saben que los necesitarán eventualmente para que aquellos rechacen los antejuicios contra ellos y en el Ejecutivo se fraguó la recomposición de la alianza a favor de la impunidad porque el Presidente trata de proteger a sus familiares, lo cual ha logrado hasta el día de hoy.

Hoy se publica que el Congreso, bajo la conducción del oscuro Chinchilla que llegó a diputado haciendo mérito como chofer de “Canela”, se prepara para dar el carpetazo a las reformas constitucionales que pretenden corregir el vicio de las Comisiones de Postulación, esas mismas que se majean con tanta maña que hasta le significaron un apartamento a uno de los que las integraron y que colocó en los listados a Stalling y toda su banda.

Para donde volvamos la vista veremos corrupción y colusión, porque a los gobernantes, legisladores y juzgadores, hay que agregar a los alcaldes, a la Procuradora General de la Nación y al Contralor de Cuentas. ¿Dónde podemos encontrar, fuera del MP y la CICIG, entidades que estén dando la batalla para limpiar al país y depurar las instituciones? Simplemente no hay esfuerzos en ese sentido y tampoco los muestra la ciudadanía que, repito, tiene ya que ponerse los pantalones para mandar a la mierda, no hay otro lugar ni otra expresión, a toda esa parvada de sinvergüenzas que nos quieren seguir viendo la cara de mula.

El cinismo de Stalling ayer fue tan asqueante como lo fue el de Baldetti y debiera ser el preludio del somatón. No sabía, cuando dio la conferencia, que todo estaba en un audio que el juez entregó a la CICIG y el MP y por ello el antejuicio en su contra está totalmente fundamentado. Pero igual han estado fundamentados otros y los rechazan o entretienen porque, al fin y al cabo, para eso fue que el “Rey del Tenis” entregó un apartamento a uno de los postuladores que se encargó de llevar a la bazofia a la Corte Suprema de Justicia.

No sé qué piensa usted, apreciado lector, pero yo no le veo otra salida a este mar de porquería.

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