Juan Francisco Reyes López
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Tratar de convencer a los trabajadores activos del Estado que deben de aportar un poco más es prácticamente imposible; prueba de ello es que en solo tres días, los sindicalizados del sector de la educación “convencieron”, por no decir acorralaron, a los diputados que hace dos meses habían decidido incrementar en Q500.00 las pensiones mínimas, y en carácter de urgente modificaron la norma y decidieron que serán los que pagan los impuestos los que contribuyan a ese incremento y no las clases activas del Estado.

El sistema de pensiones por reparto ha fracasado, y muy pronto el IGSS tendrá también que revisar dicho sistema y buscar una solución similar a la que se está aplicando en países como Chile, Perú y Argentina, donde el sistema de reparto se ha sustituido por sistema de cuenta individual donde el trabajador activo aporta un mínimo, otro aporta su empleador y el conjunto o suma de aportaciones se invierte eficientemente para que así el capital más los intereses que se acumulen sean suficientes para que la persona, al llegar a la edad del retiro, reciba una pensión mínima que le permita a él y a su esposa vivir en una forma decente.

La modificación que aprobaron los diputados obligando a los contribuyentes de los impuestos a absorber el incremento de Q500.00 a favor de los trabajadores del Estado puede ser vetada por el Presidente de la Republica o declarada ilegal, por cuanto no establece específicamente de dónde provendrán los recursos que financien el incremento a los pensionados del Estado.

La carga tributaria en Guatemala es la más baja de toda América Latina, salvo Haití, por tanto; los diputados no pueden pretender aumentar los egresos cuando no han sido capaces de aumentar los ingresos tributarios. Si bien hay diputados que por su larga trayectoria como maestros tienen especiales vínculos con ese gremio, eso no significa que tengan los estudios actuariales que justifiquen tomar decisiones tan inapropiadas.

En cuanto a las pensiones que en el programa de Invalidez, Vejez y Sobrevivencia reciben los afiliados y sus dependientes en el IGSS, no solo están desactualizadas sino que evidencian que la Junta Directiva del IGSS no está velando porque las reservas técnicas se inviertan y administren de tal forma que mantengan pensiones mínimas adecuadas para la mayoría de los trabajadores privados, lo que implica que debe hacerse una seria revisión de las normas legales respectivas y empezar a prever y no a lamentar la miseria en que viven los pensionado del sector privado del seguro social.

Hacer una revisión actuarial no se realiza de la noche a la mañana, sin embargo, debe de iniciarse los estudios respectivos, que por lo menos llevarán un año, y solicitarle asesoría a los organismos internacionales especializados.

Debe discutirse cómo invertir las reservas técnicas del IVS; mantenerlas como están es prueba de ineficiencia y falta de cuidado. El IGSS podría convertirse en el principal tenedor de cédulas hipotecarias en el sistema FHA, destinando hasta un 20% de sus reservas técnicas a ser manejadas por los bancos privados, previendo que nadie vaya a generar una estafa.

También podría ser copropietario de las empresas distribuidoras de electricidad e incluso copropietario de Chixoy y de hidroeléctricas que le garanticen al país energía eléctrica y al IGSS rentabilidad en beneficio de sus afiliados.

¡Guatemala es primero!

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