Javier Monterroso

Nadie hubiera imaginado en noviembre de 2015 que con tan solo 3 meses de gobierno Jimmy Morales estaría perdiendo la batalla contra el Congreso de la República, y menos aún contra la UNE el partido que derrotó abrumadoramente en la segunda vuelta electoral. Pero al día de hoy en Guatemala a pesar de que nos encontramos en un sistema presidencialista de gobierno, en el cual el Ejecutivo tiene en teoría mucho más poder que el Congreso, la UNE ha tenido mucha más iniciativa y liderazgo político que el Presidente.

Han sido dos las victorias de la UNE más humillantes para el Ejecutivo y el partido FCN, en primer lugar la elección de la junta directiva del Congreso y las comisiones legislativas en enero, en las que no solamente la UNE logró la presidencia del Congreso sino además las comisiones legislativas más importantes incluyendo la comisión de finanzas, encargada de aprobar el Presupuesto General De Ingresos y Egresos de la Nación. La segunda derrota se dio recientemente en los primeros días de abril, cuando el Congreso logra reunir los 106 votos necesarios para aprobar una reforma al Código Penal que castiga con pena de prisión a los funcionarios que no asistan a las citaciones al Congreso, lo paradigmático de este caso es que muy pocas veces en la historia democrática del país un Congreso había logrado superar el veto presidencial a una ley. Pero además de las dos palizas también se han dado peleas menores en las que casi siempre sale victoriosa la UNE, por ejemplo la aprobación de la ley orgánica del Ministerio Público a pesar de la oposición del partido oficial.

Existen varias razones para esta situación, por un lado la falta de experiencia política del Presidente y su equipo de gobierno conformado en su mayoría por tecnócratas sin apoyo político, la inexperiencia de su bancada a la que además le faltan operadores políticos de nivel, la carencia de un plan de gobierno y una agenda legislativa que oriente la actuación de los diputados, problemas internos dentro de la bancada, etc.; además al verse en una abrumadora desventaja el FCN incorporó a sus filas a un gran número de diputados de LIDER y el PP lo que provocó un enorme desgaste mediático.

Pero no solamente es la UNE quien ha derrotado al FCN, la mayoría de partidos políticos ha preferido hacer alianzas antigobierno a buscar acuerdos con el Ejecutivo o el partido oficial, y por primera vez en muchos años se ve una oposición política cohesionada y con una agenda común.

Sin embargo esto también conlleva riesgos para la gobernabilidad del país en el corto plazo, el Congreso no tiene las facultades para gobernar el país en un sistema presidencialista, si el Ejecutivo no toma las riendas del gobierno y de la conducción política del país no descartaría un escenario de ingobernabilidad extrema y rompimiento constitucional en el mediano plazo, y a lo mejor eso sea ya inevitable.

Artículo anteriorMauricio Macri en acción
Artículo siguienteDos temas actuales