Eugenio R. Fernández
buzonasprodecogt@gmail.com

En la coyuntura actual de Guatemala, el país requiere de cambios profundos, no solo requerimos de “caras nuevas”. En el recién estrenado Directorio de la Superintendencia de Administración Tributaria – SAT- no son tan nuevas. Puedo afirmar que conozco a un par de los nuevos integrantes del directorio que merecen respeto y beneficio de la duda, otros solo sé que acarrean sobre sus hombros relaciones y reputaciones no muy alentadoras.

El Presidente de la República debería de entender lo que el país necesita en cantidades gigantescas es transparencia. Es importante como muchos han señalado que debe de transparentar su elección del candidato a la Corte de Constitucionalidad, porque a todos nos interesa saber: ¿Cómo elegirá a su designado para dicho organismo? ¿Qué perfil, qué calidades, cuál es su grado de idoneidad, de honorabilidad etc.? La Corte de Constitucionalidad es clave para el país y las personas que la integran deben gozar de la confianza de la población. .

Clave también es la SAT y hubiese sido saludable transparentar la selección del nuevo Directorio. Al no ser un proceso transparente, bajo las circunstancias que se encuentra la administración tributaria, crea más dudas que certezas. ¿A quién representan? ¿Por qué los seleccionaron? ¿Cuál es su agenda de trabajo? ¿Cuáles son los pasos que van a tomar para transparentar el que hacer de la SAT? Es decir ¿Serán más de lo mismo o van a cambiar las cosas con este nuevo Directorio?

Sospechamos las respuestas, si no son más de lo mismo, pronto lo serán. La SAT es un objetivo indispensable para el crimen organizado, no es solo el dinero que maneja la institución, es la información que poseen y por supuesto son la Aduanas.

La SAT no necesita solamente de un nuevo Directorio, para que esta entidad funcione adecuadamente necesita reformas a su ley orgánica; Se tiene que crear un ley de la carrera tributaria adentro de la SAT; Se tienen que mejorar las leyes de acceso a la información y transparencia. Por supuesto tienen también que nombrar a un Superintendente capaz de llevar la transformación a fondo.

Al final, no solo el país necesita cambios profundos, no es solo el Directorio de la SAT, el Superintendente, las leyes, es también la ciudadanía. El despertar ciudadano el año pasado se tiene que consolidar este año. Los grupos de poder están tratando de reacomodarse y nuevamente cooptar al Estado para ordeñarlo. La administración de Jimmy Morales aún no ha dado los pasos que se requiere para salvar esta Nación, sino al contrario, parece poco concentrado en lo que es importante y las decisiones que ha tomado dejan mucho qué desear. Por ejemplo nombró al Directorio de la SAT a dedo y lo mismo pretende hacer con el Magistrado Titular y Suplente de la CC. Esto no permite que haya muchas esperanzas de transparencia en nuestras instituciones.

Es tiempo que la gente se vuelva a organizar y a exigir a funcionarios que cumplan con lo que han ofrecido, el futuro de nuestros hijos depende de eso, el futuro del país depende de eso. Mucho se habla de la Embajada y la 20 calle. Pero es hora que los ciudadanos llamen al orden a los que nos gobiernan, porque ¡GUATEMALA SIGUE VALIENDO LA PENA!

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