Grecia Aguilera
Gracias a la Embajada de Noruega en Guatemala, el miércoles 13 de enero de 2016 se presentó el Trío de Arild Andersen en un concurrido y animado concierto, que se realizó en el Teatro Lux, ubicado en el Paseo de La Sexta del Centro Histórico de la Ciudad de Guatemala. Los maestros músicos que conforman el trío son: Arild Andersen, en el contrabajo; Paolo Vinaccia, originario de Italia, en la batería y el saxofonista tenor Tommy Smith de Escocia. La música jazz que interpretaron esa noche fue muy singular, con acentuados solos de contrabajo que por momentos se tornaron intensos, inquietos y caprichosos. Inició el concierto la seductora composición titulada “Blussy” donde se lució el saxofón tenor, creando un magnífico y quejumbroso solo. Luego el contrabajo tomó la responsabilidad, ejecutando también con maestría un sobrio y efusivo solo. Enseguida el trío interpretó “Saturday”, mostrando de inmediato su alta capacidad de entendimiento mutuo. Aquí el saxofón tenor realizó una frenética y muy personal improvisación al estilo jungla, para luego unirse íntimamente al contrabajo, acompañados de la batería que realizaba continuas variaciones en sus tambores y símbalos. Llamó especialmente mi atención la melancólica melodía titulada “Mira”, que para mí está inspirada en la belleza de la estrella cuyo nombre en Latín –Mira- significa ‘maravillosa’. Esta conmovedora balada que estremece el corazón, me ha inspirado el siguiente poema: “Mira Omicrón Ceti/ en danza interestelar/ cánticos azules/ brotan de los mares/ llevando hacia el espacio/ perlas diamantinas/ exaltando el alma titilante/ ojo cósmico de Dios./ Maravillosa luminosidad/ intensa estrella colosal/ espejo brújula/ eco de los tiempos/ fulgor del firmamento./ Mira Omicrón Ceti/ sucesión de puntos veloces/ en el cíclico principio de la vida/ candileja absoluta/ advertida en el silencio/ eterno movimiento/ sonoro universal.” Arild Andersen nació el 27 de octubre de 1945 en Lillestrom, Noruega. Pienso que sus composiciones son un fenómeno sonoro propio y también figuras abstractas donde refleja musicalmente su vida personal, con la influencia del estilo del saxofonista Jan Garbarek con quien tocó de 1967 a 1973. Para el maestro Andersen la música jazz no tiene fronteras y es una forma de comunicación apegada a la vida real, que permite intercambiar ideas y sentimientos con diferentes músicos y la audiencia. Previo al concierto que presentó el trío esa noche, tuve la oportunidad de hacerle unas preguntas al maestro Andersen. La primera pregunta fue ¿Tiene usted algunas impresiones de la reunión musical que compartió con Sonny Rollins en el “KongsbergJazz Festival” de Noruega el 25 de junio de 1971? Con viva emoción me respondió que “fue una gran experiencia y es para mí un gran recuerdo”. En ese concierto el Cuarteto de Sonny Rollins ejecutó entre otras piezas “In a Sentimental Mood” original de Duke Ellington. Aquí Arild Andersen realiza un significativo solo de contrabajo que conmueve intensamente el espíritu. Una de las preguntas que más conmovió al maestro Andersen fue ¿Qué lo motivó a usted a realizarle un homenaje musical a Charles Mingus en el “Oslo JazzFestival” el 12 de agosto de 2014? Responde “Charles Mingus tocó en ese mismo salón el 12 de abril de 1964, yo tenía en ese entonces 18 años de edad y asistí curioso de escuchar su música que realmente me impactó y sorprendió. Entonces para conmemorar los 50 años de ese concierto, conformé un sexteto para ejecutar el repertorio que Charles Mingus tocó en aquel tiempo y mostrar de nuevo esa música a los jóvenes de hoy.” En este concierto Arild Andersen se ve muy complacido y las improvisaciones que realiza en su contrabajo son de gran expresividad y razonamiento lógico. Recomiendo este concierto-homenaje de Arild Andersen a Charles Mingus.
