Juan Francisco Reyes López
jfrlguate@yahoo.com

A primeras horas del día 1 del año 2016, la parca movió su guadaña y segó la vida del distinguido, valiente y brillante Coronel de Ingenieros Ricardo Méndez Ruiz Rohrmoser.

Quienes tuvimos la honra de que nuestra vida se cruzara con la vida de Ricardo, sabemos de la importancia para Guatemala que su vida tuvo.

Previo a partir, Ricardo escribió el relato en buena parte de su trayectoria, bajo el título “Crónica de una Vida”, quienes estudian nuestra historia especialmente quienes cursan estudios de ciencias políticas, de ciencias jurídicas y de sociología, deben obligadamente leer este valioso documento que comprende especialmente del año 1944 a 1992.

Ricardo nació el 1 de marzo de 1934, por lo que a su muerte había vivido 81 años, efectuó estudios primarios en el prestigioso Colegio La Preparatoria, posteriormente como muestra de su sensibilidad social realizo estudios en el Seminario Conciliar de Guatemala, dando un giro ingresó a la Escuela Politécnica donde se encontraba como cadete antiguo, en el cuarto año de carrera, en 1954 cuando se produjo el movimiento denominado de Liberación, ingresando al país una fuerza irregular denominada Ejército de Liberación que se acuartelo en la capital, en el edificio del Hospital Roosevelt el mismo todavía no había sido inaugurado como hospital, lugar donde el 2 de agosto la compañía de caballeros cadetes los enfrentó y obligó a entregarse como un acto de rescate al honor del Ejército de Guatemala, ello le significó al entonces joven cadete Ricardo Méndez Ruiz verse dado de baja de la Escuela Politécnica, al igual que el resto de sus compañeros, y encarcelado durante todo un año en la penitenciaría central de donde salió exonerado de responsabilidades penales al producirse una adecuada amnistía decretada por Carlos Castillo Armas.

Esta situación conllevó que el Ejército de Guatemala buscara rescatar a la mayoría de miembros del movimiento de cadetes 02 de agosto y los enviara con becas a diferentes países para que pudieran concluir sus estudios como oficiales del Ejército, hecho que Ricardo y Juan José Ortiz Mayén lograron al ser los dos primeros guatemaltecos becados a la Escuela de Carabineros de Chile, donde se graduaron en diciembre de 1957, mes en el que por primera vez coinciden nuestras vidas sin vernos, al ser yo aceptado en la Escuela Militar del General Bernardo O`Higgins también en Chile.

Al retornar a Guatemala como oficial del Ejército, Ricardo y Juan al poco tiempo son destinados como oficiales de la Escuela Militar de Equitación a donde yo tuve también el honor a finales de los años 60 de ser destinado como oficial en dicha escuela, lo que me permitió compartir con Ricardo y Juan las responsabilidades de oficial, así como, de habitar en el mismo dormitorio, fueron ambos parte de los testigos de mi matrimonio civil y religioso.

El 13 de noviembre de 1960, se produjo el movimiento de rebelión estrictamente militar producto de las tensiones internas en el Ejército, especialmente de las que se producían entre oficiales de escuela y oficiales de línea.

Ricardo fue enviado por parte de la Escuela de Equitación a reuniones en la Fuerza Aérea Guatemalteca, en las mismas, el civil Roberto Alejos, improcedentemente planteó soluciones a lo militar, por lo que Ricardo siendo solo un subteniente, demostrando sus principios solicito la palabra y pidió que el político Alejos se retirara.

¡Guatemala es primero!
Continuará.

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