Edith González

“Envejecer es como escalar una gran montaña; mientras se sube las fuerzas disminuyen, pero la mirada es más libre, la vista más amplia y serena”
Ingmar Bergman

El Ministerio de Comunicaciones, estamento del estado de Guatemala, es el responsable de entregar a la Asociación de Empresas de Autobuses Urbanos  subsidio por 86 millones 204 mil quetzales al año, convertidos en  7  millones 192 mil quetzales al mes,  de acuerdo a la página del ministerio mencionado,  para no elevar el valor del pasaje.

¿Cuál es el parque  de camionetas circulando? De acuerdo a la municipalidad capitalina, es de  dos mil 926, cifra de la que  hay que descontar por lo menos  120 que día a día están paradas por desperfectos o  desuso total, a las  que se les aplica el subsidio.

Se insiste en señalar que  es  la iniciativa privada la propietaria del transporte mencionado, pero resulta paradójico que el Estado mantenga el subsidio supuestamente para no afectar la economía del capitalino, pues el  dinero llega del pago de impuestos de todos los guatemaltecos, incluso de los de  la provincia.

¿Por qué ellos deberían de pagar este subsidio? Ellos no  utilizan el servicio, que a la larga es de los peores de la América Latina. El servicio de transportación en la capital guatemalteca es pésimo, pero lo subsidiamos todos.

En  2009, los transportistas recibieron un aumento al subsidio que llega a los 29 millones, para atender al adulto mayor, que bien ganado se lo tiene, lo que ahora se  convierte en extorsión  de los transportistas pandilleros criminales, quienes aseguran que aun cuando cuentan con el  subsidio, ya no permitirán a los adultos mayores subir a las camionetas, si no pagan…

Edgar Guerra, defensor  de los derechos del usuario del transporte, explica que los transportistas no deberían de recibir subsidio para  las personas mayores, pues la ley del Adulto Mayor, artículo 30,  inciso D señala que este servicio es gratuito para ellos.

Extorsionistas, criminales, delincuentes, son algunos de los adjetivos que deberíamos de usar en contra de esta nueva pandilla criminal que extorsiona a nuestros ancianos. Y mañana, quizás usen armas  de fuego para obligarlos a pagar.

¿De quién es el transporte urbano capitalino? Es privado o es del Estado, se dice que se trata del sector privado, pero recibe millonarios subsidios año con año e incluso, ya  se entregaron 35 millones de dólares para modernizarlo pero cuénteme usted si ha visto una sola camioneta nueva.

Las camionetas “rojas” son chatarra, que circulan para cobrar el subsidio. El Transurbano está sometido a investigación porque su llegada a Guatemala, fue entre nebulosas administrativas que huelen a corrupción, pero cuenta con subsidio.

Y las autoridades que deberían  vigilar esta situación, no se preocupan, pues viajan en vehículos pagados por el estado, con gasolina que sale de nuestros impuestos Por qué no se informa a los guatemaltecos quienes son los  dueños del transporte, tanto de  la chatarras roja como del Transurbano y se realiza un verdadero control  y  para evitar incumplimiento de convenios y abusos a los guatemaltecos.

Artículo anterior“Los accidentes no existen; todo lo que debemos hacer es prevenir”
Artículo siguienteAprendí el español para no callar