María Eugenia Mijangos Martínez

Se ha realizado la segunda elección, proceso fundamental en toda democracia, pero que, sin embargo, solamente es una parte de lo que constituye la dinámica del sistema democrático; la población ha elegido al binomio que estará en el Ejecutivo durante los próximos cuatro años, pero esta vez al contrario de las anteriores, la ciudadanía estará muy atenta al desempeño del gobierno; los recientes acontecimientos de este año -que se interpretan de muy distintas formas- es innegable que han dejado en los guatemaltecos y guatemaltecas, la certeza del poder de revocatoria del mandato, que aunque no existe explícitamente en nuestra legislación, funcionó de manera rotunda.

Ahora no podemos hablar como ocurría en elecciones anteriores, de que la mayoría de guatemaltecos se limitarán a manifestar su descontento o su desaprobación en pláticas de confianza, pero sin articular socialmente.

Lo anterior es un signo alentador, pues indudablemente es un salto cualitativo, aunque tuvimos que tocar fondo en cuanto a corrupción e incapacidad, para que sucediera lo que no se esperaba, confío en que no habrá retorno y de ahora en adelante, quiénes lleguen a las posiciones públicas, deben estar conscientes de que el mandato del pueblo, verdaderamente existe y que ser funcionario conlleva una gran responsabilidad, pero sobre todo independencia y un genuino interés en direccionar los actos en pro del bien común, y no en beneficio propio, es decir agenda de nación y no personal.

Me siento optimista, y quiero apostar a que la ciudadanía ya no se detendrá y continuará activando, para que la evolución democrática de Guatemala, no esté tan lejos de alcanzar. Para esto todos tenemos que aportar cotidianamente, desde el lugar donde estemos, conscientes de la importancia de que no haya un nuevo retroceso en el desarrollo democrático de Guatemala.

Para lo anterior además del accionar ciudadano, la prensa independiente y los diferentes grupos organizados también tienen un rol sustantivo en la evolución democrática, y lo demostraron durante los acontecimientos de este año.

En torno a los acontecimientos ocurridos, me vienen a la mente los versos de Otto René Castillo, que la población guatemalteca hizo realidad: “Vámonos patria a caminar, yo te acompaño…”.

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