Jorge Mario Andrino Grotewold.
@jmag2010
Un Estado bien hecho, para contar con un estado de derecho tituló el Encuentro Nacional de Empresarios –ENADE- 2015 por medio de la cual el sector privado organizado, mediante su brazo social constituido en la Fundación para el Desarrollo de Guatemala –FUNDESA- propuso una serie de reformas al aparato estatal del país, promoviendo entre otros temas la reforma y fortalecimiento de los sistemas de servicio civil, tributación, contrataciones del Estado y los mecanismos de rendición de cuentas administrativos y judiciales.
El ENADE contó con la participación de dos expositores principales, extranjeros ambos, que desde su punto de vista y experiencia, depositaron el mensaje a los empresarios e invitados especiales reunidos, que el país está en proceso de cambio y que ese cambio proviene no la fortaleza de sus autoridades, sino del ejercicio ciudadano, mismo que se reflejó desde abril del presente año.
En toda sociedad moderna, las propuestas de sectores importantes como lo son los productivos del país tienen una buena acogida, especialmente cuando alguna parte de esa responsabilidad, buena o mala, del funcionamiento de los Estados, la tienen los mismos empresarios, para el presente caso reflejado por ser un motor productivo del desarrollo del país. Por otro lado, también está presente el reflejo de un grupo empresarial que tiene un impacto e incidencia grande en Guatemala, controlando y apoyando en buena medida, a los candidatos(as) que durante las elecciones intentan convencer a los votantes de sus propuestas. No es secreto que los gobernantes anteriores establecidos en el partido patriota, fueron impulsados y apoyados por un grupo dominante del empresariado nacional, aunque dicho apoyo fue retirado de inmediato en cuanto la CICIG y el Ministerio Público demostraron que las autoridades estaban vinculadas en actos de corrupción. El apoyo se transformó en la petición de renuncia y de ser llevados a la justicia, bajo un debido proceso.
Durante el ENADE, FUNDESA presentó la reunión de varios talleres previos que reunieron expertos en distintos temas, mismos que consideraron necesarios para impulsar una reforma del Estado, que privilegiara la lucha contra la corrupción y la tecnificación de mecanismos como la carrera administrativa de la burocracia, el fortalecimiento de los procesos de rendición de cuentas basados principalmente en la Contraloría General de Cuentas y el Ministerio Público, así como la eliminación de privilegios y corruptelas mediante las compras que realizan las instituciones del Estado. Estas compras que han hecho discrecionalmente y sin transparencia algunos funcionarios, han logrado corromper los resultados de fondo hacia los habitantes como quienes requieren medicinas en hospitales, fertilizantes en el campo u otros servicios públicos indispensables para el país, entre otros muchos ejemplos. Los oscuros y leoninos pactos colectivos suscritos para favorecer apoyos políticos con los sindicatos públicos también fueron criticados, pues abusando de un derecho colectivo sano que tienen los trabajadores, han desequilibrado las finanzas públicas del Estado.
Pero para cambiar al Estado, propuesta de FUNDESA, se requiere más que solo lo que sugirió su presidente, en cuanto a la ampliación de la base tributaria y el combate contra la corrupción. Pasa también por la veeduría social en cuanto a la calidad del gasto público, el cese de la impunidad para los casos de corrupción que incluye también a los corruptores; y finalmente el aumento de las tasas impositivas, atendiendo a un equilibrio justo del crecimiento económico y el desarrollo social del país.