Julio Roberto Bermejo González*
jrbermejo@bermejolaw.com

Con fecha 25 de agosto de 2015, en una publicación en el Diario La Hora titulada “La Antigua Guatemala es una ciudad digna y merece respeto” señalé que la Administración Municipal estaba sumergida en un mar de corrupción y de ineficiencia y que ello estaba situando a la ciudad -Patrimonio de la Humanidad- en un riesgo de perder tal calidad, todo porque ni el Alcalde y el Concejo Municipal, ni el Consejo de Protección de la Antigua Guatemala – que preside el Alcalde- han cumplido con las funciones que las leyes respectivas les asignan. Hay un gran deterioro en el sistema de drenajes; se pierde gran cantidad de agua como consecuencia del mal mantenimiento del servicio domiciliar de agua; las calles se encuentran en un lamentable estado, que se acrecienta por esa intensa circulación de vehículos; la criminalidad, el consumo de drogas y la falta de control de los negocios irregulares – bares, discotecas- unos negocios con licencia para una actividad y se dedican a otra y otros sin licencia-; las policías que funcionan en forma desordenada y sin capacidad de coordinación entre unos y otros; y muchas otras cuestiones que afectan profundamente a la sociedad antigüeña.

En las elecciones celebradas el 6 de septiembre parece ser que se dio un giro de 180 grados y se eligió como Alcalde a la Arquitecta Susana Asensio, una profesional respetable y capaz, persona en la que la comunidad antigüeña depositó su confianza y de la que se espera que haga cambiar el rumbo de la administración municipal y los servicios que presta la misma.

Para la solución de la gran problemática de la ciudad es urgente agregar lo siguiente, que puede ser de mucho beneficio: a) Establecer una amplia área peatonal. Lo anterior coordinado con un eficiente sistema de introducción de los visitantes a la ciudad a través de transporte desde las áreas de estacionamiento, las que necesariamente deben establecerse. En el resto del mundo muchas son las ciudades que tienen establecido un sistema de esta naturaleza. La carga vehicular que actualmente soporta la ciudad es enorme y el deterioro es irreparable. El establecimiento de lo anterior deja a salvo el derecho de circulación de los vecinos. Se tuvo conocimiento de un proyecto que se planteaba como solución a este problema, pero pareciera ser que la corrupción lo paralizó, el cual sería conveniente que se volviera a analizar o se formulara otro; b) Es extraordinariamente urgente que la nueva alcaldesa asuma su papel como coordinadora del Consejo para la Protección de la Antigua Guatemala, a efecto de que éste se conduzca eficientemente en sus labores como ente protector de la ciudad y quede de una vez resuelto el problema de a quien le corresponde el cobro de las licencias de construcción; c) debe ponerse atención especial a la autorización de condominios y lotificaciones porque no escapa al conocimiento de la sociedad antigüeña que en este tema ha habido muchas autorizaciones irregulares.

Pareciera ser que desde la época del Doctor Vivar como alcalde éste se aseguró entre sueldo, viáticos y otras prebendas una suma cercana o mayor a Q80,000.00 y esto razonablemente es una remuneración excesiva, cuya rectificación le corresponde a la nueva alcaldesa rebajándose dicha remuneración y la de los miembros del Concejo a un nivel aceptable, como un gesto y ejemplo de austeridad.

*Doctor en Derecho

Artículo anteriorTRAGEDIA: Rescatistas reanudan trabajos en El Cambray II
Artículo siguienteSuspenden el adoquinamiento de la Colonia Cotió