Las abuelas solían decir que si así son las vísperas, cómo serán las fiestas. Ayer vimos una buena víspera, porque molestos porque los candidatos a la vicepresidencia no cabildearon con los diputados y ni el presidente Maldonado movió un dedo para hablar con los miembros del Congreso, éstos decidieron elegir al menos perfilado de los tres propuestos, el doctor Alfonso Fuentes Soria, quien había desaparecido tanto del imaginario nacional que empezó a ser llamado Juan Fuentes Soria en los medios de comunicación que olvidaron que como rector de la Usac nunca fue Juan, sino Alfonso.
Pero el caso importante es que la elección de Fuentes Soria fue resultado de un acuerdo entre las bancadas Lider, UNE, Todos y PP. ¡Bingo!
Se trata justamente de las bancadas que tendrán el control del futuro Congreso porque obtuvieron el mayor número de diputados y aunque los que conforman esos grupos parlamentarios se muevan de una bancada a otra, por la forma en que funciona el transfuguismo en el país, se van con todo y mañas, es decir que cuando se pasan de un partido a otro lo hacen con todo y sus vicios de ambición para ponerle precio o condición a sus votos.
Si algo aprende un diputado desde que toma posesión es que los votos no se dan de gratis porque los mismos devalúan la labor parlamentaria y cuando se tienen que dar, como en el caso de la elección del Vicepresidente, se usan para mandar un mensaje contundente. En este caso al presidente Maldonado Aguirre en el sentido de que tiene que “sentarse a negociar” con los diputados si quiere que le aprueben alguna iniciativa de ley, entre ellas, desde luego, la Electoral y de Partidos Políticos, no digamos cuando se tenga que hablar del presupuesto que es indispensable para el país y que no pasará sin que se abulte el ya inmenso listado geográfico de obras.
Los grupos más poderosos en el Congreso serán los mismos que tendrán poder en el próximo período legislativo. Menudo cambio el que hicimos los guatemaltecos con la participación en las urnas porque lo que terminamos haciendo es consagrar y legitimar a esos grupos de poder que se nutren de financiamientos oscuros y que son resultado de los más profundos vicios de nuestro sistema político.
Alfonso Fuentes Soria, no Juan Fuentes Soria como se refirieron a él los periodistas desmemoriados, sacó cupón como resultado de que siendo el menos conocido había sido el visto como relleno y fue electo para trazarle una línea al Presidente.
