La Avenida de las Américas se caracterizó, desde su construcción, por ser una vía relativamente expedita porque con todo y que ha crecido el tráfico en las zonas 13 y 14, rara vez se formaban largas filas para incorporarse a esa vía. En la 9ª. calle de la zona 14 era donde más complicado era el problema, pero ello era debido justamente a la falta de fluidez en el Obelisco, no obstante el paso a desnivel que, como tantos que se han construido, poco o nada ayudó para resolver el problema.
Ahora la Municipalidad de Guatemala en una acción que sin duda consideran brillante, dispuso colocar dos semáforos en la Avenida de las Américas originando un congestionamiento que antes no había. El primero, de norte a sur, está ubicado en la 16 calle, donde ya se había puesto antes a un agente de la PMT que tenía poco trabajo para facilitar que quienes entran o salen de la exclusiva colonia La Cañada no tuvieran que esperar mucho tiempo. Pero nunca, a ninguna hora, se veían más de diez o doce carros haciendo fila para cruzar la Avenida de las Américas o para incorporarse a ella.
El otro fue colocado dos cuadras arriba, en la 18 calle que ha tenido siempre muchísimo menos tráfico que la 16, lo cual ya es mucho decir. Se entiende que para la administración municipal es mucho más importante atender a los vecinos de La Cañada, que ponerle atención a los cientos de miles de automovilistas que diariamente entran a la ciudad de los municipios situados al sur de la ciudad, donde están muy pobladas colonias o aldeas como Boca del Monte, Rivera del Río, Villa Canales, o Villa Hermosa, Petapa y parte de Villa Nueva.
Los congestionamientos que han formado esos dos semáforos son descomunales y se ve la ausencia de planificación de una Municipalidad que ni siquiera se tomó la molestia de probar qué pasaría si se ponían esos dos tapones con el tráfico inmenso de la gente que entra a la ciudad de Guatemala. Vecinos de la ciudad al sur de esos puntos no son muchos, pero los de otros municipios abundan y es gente que contribuye al desarrollo económico del municipio capitalino.
Verdaderamente da pena ver que en vez de buscar medidas para resolver problemas viales, las autoridades se encarguen de buscar más problemas para complicarle la vida a los guatemaltecos. Bastaría hacer un censo en La Cañada para determinar que la Municipalidad sacrifica a cientos de miles para beneficiar a unos cientos.