Gladys Monterroso
licgla@yahoo.es
Sinceramente, alucino cuando leo en las noticias, que se pierde, desaparece, esfuma o no hay rastro de millones de quetzales, en diversas instituciones del Estado, no entiendo cómo podemos vivir tan frescos, hundidos en la más grande pobreza, con una gran cantidad de “nuevos ricos”, y que como corolario a lo anterior, se pierda el dinero que ejecutan diversas instituciones.
En un país más que bananero, conocido como uno de los más pobres, y donde se gestionan préstamos públicos, como quien va a la tienda y compra de fiado, parece inaudito que el dinero de los impuestos que pagamos todos, pero que al no alcanzar, porque el Estado parece un barril sin fondo, se tenga que acudir, cada dos por tres al endeudamiento público, algunas veces kafkianamente para pagar deuda, o sea se presta para pagar un poquito de lo que se debe, y quedamos peor, todavía debemos el primer préstamo, y sumamos el segundo, sin embargo, con todo y eso el dinero se pierde.
El dinero público se viene “perdiendo” desde hace algún tiempo, pero hoy siento en lo personal que es más grosero, las cantidades son millonarias, y nuestros niños se siguen muriendo de hambre, no contamos con salud, educación y seguridad, esta última se encuentra privatizada desde hace muchos años, con el aval de los diferentes equipos de gobierno, pagamos impuestos, pagamos préstamos, préstamos dinero, y se “pierde”.
El problema que no exista rastro de miles de millones de quetzales, es derivado de la poca o nula fiscalización pública de los fondos del Estado, se pueden esfumar mil quetzales, y el responsable los tendría que reponer, pero miles de millones, ese tema si ya raya en lo inaudito, porque no estamos hablando de papel toilette, ni de papel bond, aunque pareciera, por la poca importancia que se da a la investigación de oficio de las noticias de prensa sobre la desaparición de semejantes cantidades.
Creo que existe, una falta total de voluntad política por parte de las instituciones encargadas de estos temas, de dar seguimiento a las diversas noticias, que inundan diariamente los medios de comunicación, en relación a dos temas fundamentales para salir del hoyo financiero en el que estamos, el MP está ciego sordo y mudo, para perseguir a los delincuentes de guante blanco, desde que se principiaron a denunciar los primeros casos de corrupción, y la CGC, parece cadáver al no investigar la veracidad de las noticias, lo que deja al país en estado de indefensión, ya que es mi criterio muy personal, que no es que se haya vuelto parte del paisaje la enorme corrupción, desaparición de dinero público, y otras noticas más, sino que no existen los arrestos necesarios, para investigar un problema por demás identificado, no hay mucho donde perderse, sin embargo nuestras autoridades fiscalizadoras están perdidas en una calle, que tiene suficientes avisos para seguir el camino.
Si sumamos al problema de la pérdida de dinero, el endeudamiento público, la pobreza insostenible del guatemalteco de a pie, ese que se compra ropa de paca, que compra Q5.00 de saldo, que come en la calle, o lleva envueltos cuando bien le va al trabajo para el almuerzo, ese clasemediero, pero que paga el IVA en todo lo que consume, a ese si le afecta que desaparezcan miles de millones, sin que exista rastro alguno de ese dinero que es de él, sí señores, el dinero es del pueblo, los funcionarios lo administran, y por eso reciben un salario, en teoría así es como debe funcionar una sociedad que vive en democracia, pero la nuestra parece una caricatura mal elaborada de lo que es un Estado de Derecho, y no solamente cuando se habla de Derecho se trata del sector Justicia, se espera el respeto a las diferentes leyes, pero especialmente las morales, las que no están escritas, pero que hacen al individuo un ser humano, que existe una gran diferencia entre los dos supuestos.
