El departamento de Baja Verapaz está conformado territorialmente por ocho municipios, cada región tiene hechos históricos, es rico en su agricultura y la fauna, especialmente Rabinal, uno de los más poblados de la región, que en antaño cosechaba las mejores naranjas traídas de Valencia, España, por el sacerdote Fray Bartolomé, famosas a nivel nacional e internacional, por su aroma y exquisito sabor, con el tiempo esa fruta ha desaparecido por la furia climática que hizo severos estragos en los regadillos donde ese producto se cosechaba.
Rabinal, donde nacimos y donde cursamos dos años en la escuela nacional, con el correr de años, ha perdido su tradición, por la irresponsabilidad de las autoridades locales y de los gobiernos, especialmente el de Cultura y Deportes y la Dirección de Turismo. En las fechas del 18 al 25 de enero de cada año, se celebra la fiesta titular de San Pedro y San Pablo Apóstol, que da origen a que nacionales y extranjeros, asistan a sus actividades y disfruten de los bailes regionales, que son de origen histórico que por años ha sido admirado por propios y extraños.
En ocasión de la feria de San Pablo y San Pedro visitamos el pueblo que nos vio nacer para disfrutar de su gastronomía y sus bailes regionales, pero nos sorprendió al ser informados por grupos regionales que el tradicional baile de la danza histórica del Rabinal Achí, no se iba a presentar por los gastos que representa para sus organizadores. Nos abocamos al edificio municipal para hablar con el alcalde Octavio Alvarado García, el secretario del despacho nos indicó que el funcionario se presenta a su oficina solo “dos días a la semana” por las inspecciones que hace en las aldeas de la región, su ausencia ha originado confrontación con el vecindario que exige al jefe edil más responsabilidad.
La danza del Rabinal Achí tiene más de 800 años, tiene su origen en el relato del Rabinal Achí, y es obligación de las autoridades locales hacer las gestiones en el Ministerio de Cultura y Deportes y la Dirección de Turismo, para que se den los aportes anuales para que esa histórica tradición se realice cada fiesta titular de la región. Hay que reconocer que el vecino José León Coloch Garnica, ya fallecido por años mantuvo el Rabinal Achí. Ahora es su hijo José Manuel que lucha para que esa tradición de la presentación del Rabinal Achí, no muera y tiene proyectado presentarla el otro año para la feria titular; espera que las autoridades den auxilio económico, la indumentaria que se usa en el correr de los años, se ha deteriorado.
El Rabinal Achí, el drama dinástico maya de hace varios siglos y es uno de los testimonios de la tradición prehistórica por lo que no debe morir, se presentan mitos en torno a los orígenes de la región de Rabinal, que en el correr de los años, su urbanismo ha cambiado y sus vecinos siguen luchando para que esa aguerrida región que en el pasado fuese sometida a la violencia por la incursión de grupos armados, continúe prosperando en bien de sus habitantes y sean ejemplo de las futuras generaciones.
Como obligación de nacidos en ese histórico pueblo -Rabinal-, siendo presidente de la Asociación Rabinalense, en el terremoto del 4 de febrero de 1976, hicimos gestiones ante el comité de emergencia que funcionó a raíz de esa época y nos ofrecieron ayuda en víveres para auxiliar a nuestros paisanos que afectados por el movimiento telúrico y fuimos reconocidos por esa labor humanitaria por el alcalde a la razón Pedro Xitimul Pérez.
Esperamos que el baile Regional del Rabinal Achí, no muera de inanición, que vuelva a resurgir, fue declarado como patrimonio intangible de la nación y todos, especialmente los que allá nacimos, tengamos la obligación de luchar porque esa tradición no muera y el año que viene, Dios nos dé vida y ver desfilar por las calles y frente a la iglesia local, la presentación de ese histórico baile de una tradición que no debe morir y eso esperamos.