Por años ha sido una mala práctica de los partidos, especialmente de diputados por intereses políticos a cambio de recibir fuertes sumas de dinero, cambiarse de partido, que la Ley Electoral y de Partidos Políticos prohíbe; un grupo de diputados de diferentes facciones, pretende una reforma a la ley que regula todo proceso electoral, pretende hacer, quitarle la autoridad que por ley, tiene el Tribunal Supremo Electoral, acciones espurias e ilegales que de aprobarse rompería el orden constitucional, sería una descarada violación a la misma Constitución Política y la ley que regula y norma todo evento electoral.
Tales reformas la hicieron varios integrantes de la Comisión de Asuntos Electorales del Legislativo, instancia conformada por legisladores de diferentes bancadas, reformas no fueron incluidas en los anteproyectos que en varias ocasiones ha hecho el Tribunal Supremo Electoral. En las reformas de marras, se pretende, de ser aprobadas por el pleno del Legislativo, quitarle autoridad al TSE, y la Contraloría General de Cuentas que por ley, está facultada para hacer auditorías en todas las entidades públicas del Estado, por supuesto en los Partidos Políticos.
Al conocer el pleno del Congreso, las descabelladas reformas que se pretenden hacer a la Ley Electoral y de Partidos Políticos, es aconsejable incluir las que han presentado los magistrados del ente electoral en diferentes épocas, escuchar a expertos versados en el tema electoral y en los procesos políticos, abrir diálogos abiertos con todos los sectores de la población, de ser aprobado dicho anteproyecto en la forma que está redactado, sería una dura afrenta a la democracia, que discurre entre negros nubarrones, acciones espurias y politiqueras del Ministerio Público y jueces venales que se han vendido a ciertos sectores.
Pero a la vez, creemos saludable hacer una consulta de opinión a la Corte de Constitucionalidad, antes que pase al pleno, para que tenga certeza y credibilidad, pues se conoce que los que se oponen abiertamente a esas reformas, están conscientes que es una violación a la Carta Magna y a la Ley Electoral y de Partidos Políticos, se dice en la reforma, que no se impondrán sanciones a los dirigentes políticos que violen la ley y sería una dura mascarada a la supuesta democracia que vivimos y daría lugar para que el MP y el Organismo Judicial, con jueces violadores de la ley, sigan involucrados en hechos que por ley, no les compete.