A los migrantes guatemaltecos cada día se les confirman enemigos en Guatemala, ahora resulta que los ABUSOS en la Intendencia de Aduanas, Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) y la Empresa Portuaria Nacional (Empornac), se hacen más evidentes por los constantes ajustes, atropellos, robos que se han convertido en saqueos por la difícil crisis de corrupción que vive Guatemala, porque tienen funcionarios que solo llegan a estas instancias de poder para presionar a los grupos empresarios vulnerables que se les dificulta defenderse por no tener presencia en el país; digo esto, porque no sucede lo mismo con aquellos grandes emporios comerciales ya conocidos, a quienes estas instancias no se atreven a revisar sus importaciones y los dejan pasar libremente, sin mayores obstáculos.
Las Remesas en Especie (Encomiendas) siguen ese tormento con estas autoridades, a las que se les suman los famosos cobros ilegales de los corruptos, descarados e indeseables policías de la Secretaría General de Información Antinarcóticos (SGAIA), División de Protección de Puertos y Aeropuertos (DIPA), ambas de la Policía Nacional Civil y se les agregan otros malandrines del control fito/zoo sanitario de MAGA OIRSA. El personal descrito en estas instancias se atreve a parar las gestiones y trámites de importación, pidiendo entre todas las coimas o mordidas, cifras que llegan a los Q5,500, cobros fuera de ley que a todas luces son robos de estos infames desgraciados.
Por ley la única instancia que debe revisar las importaciones es Aduanas y nadie más tiene ese derecho!, pero resulta que últimamente se han dado revisiones en instalaciones de la Empresa Portuaria Nacional, donde abusivamente su personal ha abierto mercancías, sin mostrar las revisiones gravadas en sus cámaras de seguridad, convirtiéndose en otra instancia de gobierno que tiene mucha gente con galardones serios de marcada corrupción, muy parecida, pero en mejora continua, si la comparamos con la famosa LÍNEA.
En estas de las importaciones que los migrantes enviamos a Guatemala hay mucha tela que cortar y el gobierno de Arévalo debe entrarle con ganas a este asunto, porque si algún día los migrantes dejan de enviar remesas en efectivo y especie, Guatemala sufrirá graves consecuencias. La corrupción en las esferas de Aduanas, Empornac, SAT, policías, MAGA OIRSA, entre otros particulares, sigue su marcha inexorable e imparable y el gobierno le debe entrar como dice Roberto Arzú: CON HUEVOS. Esta forma ilegal de hacer dinero hay que combatirla de frente y hay que bajar a la operatividad de ver como se manejan esas grandes movidas en todas las instancias, principalmente en aquellas que manejan grandes entradas de dinero.
Los empresarios migrantes han tenido reuniones en Estados Unidos y Guatemala con el Ejecutivo (presidente Arévalo) y Legislativo (presidente Nery Ramos, Comisión del Migrante, Relaciones Exteriores, etc.), poniéndoles en contexto los serios problemas que hoy afrontan e incluso se presentó un documento que contempla la Ley de la Encomienda del migrante que busca se le dé el valor social que representa actualmente. Estamos a la espera de las respuestas de estos organismos del estado, por un lado, el Presidente Arévalo se comprometió en crear una Mesa Técnica Interinstitucional para analizar esta problemática, estamos a la espera de esa fecha, por otro lado, el seguimiento correspondiente por parte de las autoridades del Congreso de Guatemala y que no nos pase lo mismo de cada cuatro años que nos reunimos con las más altas autoridades y no pasa nada, porque sigue lo mismo el migrante les vale un gorro a nuestras autoridades.
El proceso Importación/Exportación del extranjero para Guatemala y viceversa se le debe poner atención porque hay muchas cosas que no están funcionando en beneficio de aquellos emprendedores migrantes que el único deseo que tienen es invertir para participar en la cadena económica/financiera/comercial.
Seguimos esperando respuesta del presidente Arévalo y el Congreso Nacional para trabajar seriamente, porque los migrantes sí queremos trabajar honradamente pagando impuestos para engrandecer Guatemala, pero con un trato justo.