Roberto Blum

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El estudio «Street Corner Society» de William Foote Whyte y «Los hijos de Sánchez» de Oscar Lewis son dos obras fundamentales en la antropología y la sociología urbana que proporcionan una mirada profunda y empática a las vidas de comunidades marginadas. Ambos autores utilizan métodos etnográficos para explorar las complejidades de la vida en contextos urbanos desfavorecidos, aunque cada uno lo hace desde perspectivas y con enfoques ligeramente distintos.

El libro «Street Corner Society» de William Foote Whyte fue publicado en 1943 y es un estudio pionero en la sociología urbana que se centra en el barrio italiano de Cornerville en Boston. Whyte pasó varios años viviendo y participando en la vida cotidiana de este barrio, lo que le permitió desarrollar una comprensión detallada de las dinámicas sociales internas. Su trabajo es notable por su método de observación participante, donde se integra en el grupo que estudia, ganándose la confianza de los residentes y obteniendo información de primera mano sobre todos los aspectos de sus vidas.

Whyte describe cómo los jóvenes del barrio se organizan en grupos conocidos como «gangs» o bandas y ahora “maras”, las que tienen una estructura interna y cuentan con jerarquías claras. Estos grupos proporcionan a los jóvenes un sentido de identidad y pertenencia en un entorno que de otro modo podría parecerles hostil y alienante. Además, Whyte examina las relaciones de poder dentro de la comunidad, señalando cómo los líderes de los grupos juveniles interactúan con figuras de autoridad y con el sistema político local.

Una de las contribuciones más significativas de «Street Corner Society» es su enfoque en las redes sociales y cómo estas redes influyen en el comportamiento y las oportunidades de los individuos. Whyte desafía las percepciones estereotipadas de las «bandas” como simplemente estructuras delictivas, mostrando, en cambio, que estos grupos tienen funciones sociales de importancia y que indudablemente proporcionan apoyo mutuo entre sus miembros.

Por su parte, «Los hijos de Sánchez» de Oscar Lewis, libro publicado en 1961, es un estudio etnográfico basado en entrevistas detalladas con una familia que vive en un barrio pobre de la Ciudad de México. Lewis utiliza la técnica de historia de vida para dar voz a los miembros de la familia Sánchez, permitiéndoles contar sus propias historias en sus propias palabras. Este enfoque da al lector una visión íntima y personal de las dificultades y las esperanzas de esta familia.

Lewis es conocido por su teoría de la «cultura de la pobreza», que postula que los pobres desarrollan ciertos comportamientos y valores adaptativos que los mantienen en su condición de pobreza. En «Los hijos de Sánchez», Lewis examina cómo estos patrones culturales se transmiten de una generación a otra, perpetuando un ciclo de pobreza. A través de las narrativas de los miembros de la familia, se revelan las luchas diarias, las estrategias de supervivencia y las formas en que la pobreza afecta las relaciones familiares y personales.

A diferencia de Whyte, que se enfoca en la organización y las redes sociales de una comunidad, Lewis pone un mayor énfasis en los aspectos psicológicos y emocionales de la vida en pobreza. Su obra es profundamente humana centrada en los individuos y sus relaciones, mostrando no solo las dificultades materiales, sino también las aspiraciones, las alegrías y los sufrimientos de las personas.

Aunque ambos estudios se centran en comunidades urbanas marginadas, sus enfoques metodológicos y teóricos presentan diferencias significativas. Whyte, con su inmersión en la vida comunitaria y su énfasis en las redes sociales, proporciona una visión más estructural de cómo se organizan y funcionan los grupos dentro de una comunidad. Su enfoque destaca la importancia de las relaciones interpersonales y las estructuras de poder en la formación de identidades y oportunidades, mientras Lewis, por su parte, ofrece una perspectiva más introspectiva y psicológica, utilizando las historias de vida para explorar cómo la pobreza afecta a los individuos a un nivel personal y emocional. Su teoría de la «cultura de la pobreza» ha influido en nuestra comprensión de la pobreza, aunque también controvertida, ya que algunos críticos argumentan que puede reforzar estereotipos negativos y no considera suficientemente las estructuras económicas y políticas que perpetúan dicha condición.

Ambas obras comparten un compromiso con dar voz a los marginados y desafiar las percepciones simplistas y estereotipadas de las comunidades pobres. A través de su trabajo etnográfico, Whyte y Lewis muestran que la vida en comunidades marginadas es compleja y multifacética, y que los individuos dentro de estas comunidades son agentes activos que navegan y responden a sus circunstancias de maneras diversas y creativas.

Así, se puede afirmar que «Street Corner Society» y «Los hijos de Sánchez» son dos estudios fundamentales que han contribuido significativamente a nuestra comprensión de la vida en contextos urbanos desfavorecidos. Mientras Whyte nos invita a ver las estructuras sociales y las redes de apoyo en un barrio italiano de Boston, Lewis nos lleva al corazón de una familia mexicana para entender los impactos personales de la pobreza. Juntos, estos trabajos enriquecen nuestro entendimiento de la resiliencia humana y las dinámicas de la vida urbana en su enorme complejidad.

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