El problema es que hemos venido manoseando nuestras leyes y muy en especial hemos venido faltándole el respeto a la Constitución Política de la República de Guatemala. Hemos abusado de la interpretación de la ley y de la falta de atención de la población que tiene en la mente en otros temas, como la supervivencia familiar, al buscar día a día el sustento y no observar cómo suceden las cosas.

De acuerdo a las leyes vigentes y a la propia Constitución de la República, por razones que no me voy a poner a detallar en esta oportunidad, porque ya hemos hablado de ellas en otra ocasión, llegando a la conclusión de que urge una reforma en seguridad y justicia. En este país, los Magistrados de Salas de Apelaciones, de la Corte Suprema, los Magistrados del Tribunal Supremo Electoral, el Fiscal General de la Nación, entre otros cargos, se han tenido que designar o elegir de forma indirecta por medio de un sistema que ya no funciona.

Y que si bien, todos sabemos que atrás de los distintos grupos que participan de las distintas actividades para elegir funcionarios, hay siempre un personaje o varios, muy poderosos que normalmente no dan la cara. Y qué razón tienen, porque esta vez pude comprobar que cuando se da la cara hay que estar dispuestos a pagar las consecuencias, de los terribles ataques de quienes normalmente se basan solo en los dimes y diretes que llegan a sus oídos.

¿Qué pasó? Esta semana en el capítulo de ROBERTO ALEJOS PODCAST tuve la oportunidad de entrevistar a Roberto López villatoro, mejor conocido como el “Rey del Tenis”. Nos explicó cuál era la situación actual en los temas de justicia y cómo se vinieron desarrollando en los últimos años. Muy especialmente, nos habló de cómo se desarrolló todo cuando estuvo presente la CICIG YouTube.

De manera muy grata nos habló de por qué es conocido como el Rey del Tenis, cómo fue que se inició en este tema de la incidencia para poder proponer candidatos e incluso llegar a influir en la escogencia de candidatos a Magistrados de Salas y Magistrados de la Corte Suprema de Justicia. Nos habló de su experiencia cuando fue enjuiciado por denuncia de las CICIG, manifestando su dolor cuando nos narra y nos dice que entiende cómo él pudo haber sido perseguido, pero no entiende, no comparte y no está de acuerdo con qué esa persecución incluyera a su hermana y como lastimó al resto de su familia, como sucedió en muchos casos o por qué no decirlo sigue sucediendo.

Hablamos de todo un poco, pero el enfoque estaba muy hacia la recién pasada elección de las personas que a partir de entonces van a dirigir el Colegio de Abogados, un colegio sumamente desprestigiado que ha venido a desprestigiar la profesión. Explicándonos y aceptando que ha estado detrás de estas elecciones o atrás de las comisiones para postular candidatos y cómo esta vez tomó la decisión de dar la cara y aparecer como candidato sin esconderle nada a nadie. Explicó cómo se había separado de los demás grupos y cómo había tenido una candidatura independiente, candidatura que a mi criterio, ayudó a dividir el voto de la planilla que todos creíamos que podía ganar por la manipulación de los abogados que trabajan en las instituciones que no están actuando de lo mejor.

NO SE VALE, que no le pongamos atención a esta charla, que no le pongamos atención a todo lo que dijo en relación a cómo se han sentido quienes tuvieron que pasar por el famoso Mariscal y sobre todo no le pongamos atención a tantos temas que él fue aceptando, en una conversación, aún a riesgo de ser criticado.

Y es que no debemos acostumbrarnos a escuchar siempre solo lo que nos gusta. A estar viendo o escuchando a personas que hablan y piensan igual que nosotros, que están del mismo lado y no vayamos adquiriendo esa costumbre tan necesaria, de escuchar a quienes alguna vez criticamos. Escuchar a aquellos con quienes no compartimos sus ideas o su ideología, poniendo en práctica un tema que en Guatemala hace ratos que no se hace, la tolerancia. Porque vaya si necesitamos ser más tolerantes para poder escuchar y conocer de cerca a quienes han jugado papeles difíciles en la historia de este país

YA ES HORA que entendamos que la confrontación no nos conduce a nada, que es el diálogo y el entendimiento lo que nos puede llevar a construir juntos, una nueva nación que podamos de nuevo hablar de reestructuración o de refundación del sistema que para muchos colapsó. Que para otros lo hicieron colapsar, aunque para la mayoría lo que es; es un sistema infuncional, a raíz de que cada grupo ha buscado fortalecer sus intereses y no buscar los intereses en común.

No se trata simplemente de decir; a este no lo veo ni lo escucho porque no me gusta lo que ha hecho en el pasado. Se trata de decir a este lo voy a escucho porque quiero saber qué piensa. Para tener la oportunidad de dialogar con él o con ella para tratar de apoyarlo en su nuevo proceder y sumarlo al grupo de personas que aún cree o creemos que podemos salvar a este país.

José Roberto Alejos Cámbara

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