La figura del pulpo es pertinente, porque existe una cabeza de la corrupción –grandes ricos y sectores estadounidenses trumpistas– que maneja las mafias, un grueso y firme cuello –Consuelo Porras y señalados en Lista Engel y la Ley Magnitsky– y múltiples tentáculos, especie de babosas y serpientes, que se han metido en el Estado, las entidades autónomas y la iniciativa privada. Acabar con el pulpo en su totalidad parece hoy imposible; pero, de cortarse el cuello, la cabeza se quedará hablando sola y los tentáculos no tendrán de dónde colgarse; terminarán carcomiéndose. Esto es lo que Semilla y el gobierno de Arévalo y Herrera no han entendido. Mientras que el MP sea cuello del pulpo, las batallas parciales contra los tentáculos serán intrascendentes, con victorias pírricas a veces y, con mayor frecuencia, retrocesos y aún derrotas. Acaba de ocurrir en el Congreso, en donde Vamos, el tentáculo legislativo, se ha apoderado nada menos que de la presidencia de la Comisión de Finanzas, en donde apunta a ordeñar el presupuesto nacional y financiar la próxima campaña electoral. Este retroceso contrasta con las victorias pírricas de contar hoy con la Junta Directiva del Congreso y casi la mitad de la CSJ. Malos augurios para la designación de MP, TSE, CGC y CC.

Se benefician mucho más del cuello del pulpo las entidades autónomas, que actúan como pequeños feudos en donde hacen lo que se les da la gana, sabiendo que el MP bloqueará los casos que se presenten en su contra. Hay denuncias de fraude y corrupción en el IGSS y las municipalidades, entre otras, que son debidamente engavetadas por la Fiscal General, además del hecho de que ella seguirá persiguiendo a operadores del sistema de justicia que le causen problemas al pulpo y premiando a los jueces truchos y demás “cómplices engelianos”, que le hacen los mandados –La Hora informa: “Unión Europea suma a su lista de sancionados a juez Bremer, Méndez-Ruiz, Falla y la Fundación contra el Terrorismo”.

Gracias al pacto de Porras con el usurpador de la Usac, éste se ha convertido en feroz déspota, que irrespeta los dictámenes de la CC para renovar el corrupto CSU; ha dejado sin elecciones a escuelas facultativas y centros universitarios, mientras que sus incondicionales operarios se convierten en interventores; ha sancionado a universitarios que le critican y le hacen resistencia, al punto de expulsar recientemente a diez estudiantes; ha denunciado falsamente a diputados que fiscalizaban una de sus “empresas” dentro de la universidad; y ha montado un proceso electoral de decanos, ilegal e inmoral, para garantizarse apoyos para su codiciada elección como próximo rector. Su objetivo es, con apoyo de socios corruptos en las unidades académicas y el control de las oficinas administrativas de la universidad, un proceso de “planillas únicas”, plegadas a la maquinaria en el poder. Esta armazón ilegítima se caería como castillo de naipes si el MP fuese un ente honestamente conducido. Insisto ante Arévalo y Herrera: no se puede dejar al tiempo la sustitución de la fiscal general. ¡O desactivamos ya al pulpo o éste nos estruja y nos devora!

Raul Molina Mejía

rmolina20@hotmail.com

Nació el 20/02/43. Decano de Ingeniería y Rector en funciones de USAC. Cofundador de la Representación Unitaria de la Oposición Guatemalteca (RUOG) en 1982. Candidato a alcalde de la capital en 1999. Profesor universitario en Nueva York y la Universidad Alberto Hurtado (Chile). Directivo de la Red por la Paz y el Desarrollo de Guatemala (RPDG).

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