Pedro Pablo Marroquín Pérez
pmarroquin@lahora.gt
@ppmp82
Fuentes del Tribunal Supremo Electoral (TSE) dicen que hay muchos más expedientes en revisión respecto a la conducta de los políticos y la pregunta se hizo porque tras los actos del Jefe de Jefes y las acciones de Manuel Conde, surge la duda por qué “salieron” primero Roberto Arzú y Neto Bran.
Casualmente, los dos “sancionados” se han referido a la situación personal del Presidente Alejandro Giammattei y seguramente que eso al mandatario y a Miguel Martínez no les ha caído en gracia. De hecho Arzú hizo el fin de semana un video desde un hospital en el Interior del que la misma Presidencia no se quiso pronunciar.
Siempre he creído que eso de que los políticos deban ser sordos y mudos es una aberración democrática y si ahora el Registro de Ciudadanos (RC) va a aplicar la norma, debe hacerlo parejo porque deja mucho que desear que para los que el régimen detesta haya agilidad y para los que operan el régimen, el parte es sin novedad.
Los sancionados todavía pueden apelar y en el pasado la Corte de Constitucionalidad (CC) terminó dándoles la razón y pudieron participar quienes habían sido “dados de baja” del proceso. Ahora que Leyla Lemus comanda la CC de Giammattei y Martínez, muy probablemente estas eliminaciones electorales se mantengan.
Giammattei se lavará las manos diciendo que fue el TSE quien decidió, no él, pero para nadie es secreto las mil y una maneras en las que el Gobierno opera, presiona e incide en los distintos poderes. Vean la forma en la que opera el Ministerio Público (MP) y la Procuraduría de Derechos Humanos (PDH) solo para tener ejemplos de “entes autónomos” que se pliegan al Gobierno.
Ninguno de los dos sancionados es santo de mi devoción, pero esto no se trata de que si los que nos caen bien participan o no; se trata de tener un proceso de elecciones limpio, transparente y que participen todos aquellos que, cumpliendo los requisitos de ley, deseen meterse a la arena política.
El RC empieza a ser útil como luego lo será la Contraloría General de Cuentas (CGC) revocando finiquitos a los que ya lo tienen o negando a los que piden y por eso es que las presiones del régimen en la comisión de postulación de Contralor fueron brutales.
Empezaremos a ver casos/denuncias en el MP, que seguramente no avancen, pero que serán suficiente para revocar o denegar la emisión de finiquitos.
Desde hace meses se ha dicho que vamos en la ruta de Nicaragua y poco a poco se van dando hechos que deberían abrirle los ojos a la gente.
Si siempre han dicho y en especial en el 2015, que las elecciones eran sagradas y que hay que llevarlas a cabo bien, ahora es el momento de entender que las mismas están en riesgo severo.
Han llegado hasta donde han querido por nuestra incapacidad de articular acuerdos para trazar una ruta sostenible para este país.
