Luis Alberto Padilla

Doctorado en ciencias sociales en la Universidad de Paris (Sorbona). Profesor en la Facultad de Derecho y en la Escuela de Ciencia Política de la Universidad de San Carlos. Es diplomático de carrera y ha sido embajador en Naciones Unidas (Ginebra y Viena), La Haya, Moscú y Santiago de Chile

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El ejecutivo está haciendo sus mejores esfuerzos por llevar a cabo tanto el Plan de Gobierno con sus políticas consecuentes (elaboradas por SEGEPLAN), de eso no cabe duda. Se ha visto obligado a hacer cambios en el gabinete ministerial y el ministro  de Salud,  – al parecer –  agobiado por las constantes citaciones al Congreso que le impedían dedicar tiempo a su trabajo tuvo que renunciar. La crisis portuaria impidió al presidente Arévalo viajar a Europa hace poco, algo de lo cual nos enteramos en un podcast de Tan Gente y en una entrevista que le hicieron allí mismo a Quique Godoy.  La elección de cortes se ve venir como el gran tema de la agenda nacional para los próximos meses y los amigos del mismo medio comunicacional se encargaron de entrevistar a Edgar Ortiz y a Gregorio Saavedra, que será integrante de las Comisiones de Postulación por parte del Colegio de Abogados.  Los nuevos ministros, como Patricia Orantes al frente del MARN y Félix Alvarado en Comunicaciones,  hacen sus mejores esfuerzos por poner en orden el trabajo de sus respectivas carteras y lo mismo ocurre en otros ministerios como el de Educación en donde Anabella Giracca, recientemente explicaba en un video a la ciudadanía las dificultades que ha tenido con el eterno dirigente del sindicato de maestros porque este se opone a que se hagan públicos los compromisos adquiridos por el gobierno en el Pacto Colectivo de Condiciones de Trabajo.

Por su parte, la ministra Orantes hacía ver en otra entrevista concedida a  Tan Gente las dificultades que ha sufrido como consecuencia de la resolución de la CC de amparar a la ANAM con motivo de la decisión ministerial de no conceder más prórrogas a las municipalidades para que construyan plantas de tratamiento de desechos sólidos y aguas servidas,  expresando su confianza en que aquellas entidades edilicias que estén dispuestas a colaborar lo hagan (mencionó a la municipalidad capitalina en sentido positivo) mientras el ministro Alvarado hizo un pequeño video sobre la forma desastrosa en que encontró todo en el Ministerio de Comunicaciones y en una entrevista con Roberto Alejos,  difundida en el podcast de éste último,  explicaba por qué es tan difícil para el ministerio supervisar la obra pública, señalando que un objetivo principal de su gestión será dotar al ministerio de esa capacidad de supervisar la obra pública sin necesidad – fue lo que entendimos –  de contratar empresas privadas para que lo hagan, aunque – a nuestro juicio – es precisamente a causa de las políticas neoliberales iniciadas durante la administración Arzú que hicieron  “desaparecer” de facto a la  Dirección General de Caminos que las cosas andan tan mal en ese Ministerio. Ahora resulta que toda obra pública  debe contratarse con el sector privado y si una determinada empresa  alega que reparar un agujero provocado por las lluvias no entra dentro de sus obligaciones contractuales tanto peor para los infelices usuarios de una determinada vía de comunicación. El restablecimiento de una Dirección General de Caminos capaz de movilizarse rápidamente y con eficiencia cuando se producen tales percances debería ser otra de las tareas de las nuevas autoridades.

Pero – se preguntarán los lectores –  ¿a cuenta de qué la referencia a los anteriores avatares gubernamentales?    Y la respuesta es que nos hemos enterado a través de los famosos podcast  que cumplen con una función de divulgación de las actividades de gobierno que, siendo muy importante y valioso que lo hagan (y que continúen haciéndolo), sólo llega a segmentos de la población que por su edad o ubicación social disponen del tiempo suficiente para escuchar una hora o más de estas entrevistas o de la filmación de eventos oficiales. De manera que la mayoría de la población no tiene manera de enterarse de lo que está haciendo el gobierno y cuáles son las dificultades que enfrenta.  En un contexto en el cual  existe un constante bloqueo de las políticas públicas por parte de una CC y de un MP manipulados por el pacto de corruptos y que además hay repetidos ataques en redes sociales, para contrarrestar todo esto es fundamental informar a la ciudadanía para no perder el apoyo social de que aún goza este gobierno.

Y para ello es urgente establecer una política de comunicación social apropiada tanto en redes sociales a través de mensajes cortos (como los de Tiktok)  como divulgando toda clase de declaraciones oficiales, discursos y lo que se diga en conferencias de prensa tanto por el presidente como la vicepresidenta o los  ministros, tanto en su forma completa para aquellos que dispongan de tiempo para verlos como en forma de resumen concentrado para que vaya a las redes sociales. Para poner un par de ejemplos, hace poco el presidente Arévalo pronunció unas sentidas palabras con motivo de la repatriación de los restos de Miguel Ángel Asturias y también hubo un evento en ocasión de la presentación del Informe del año pasado sobre las labores de Naciones Unidas en nuestro país, así como acerca de los avances en el cumplimiento de los compromisos de los ODS. El panel de expertos que presentaron el informe estuvo moderado por la señora Torrebiarte, nueva presidenta del CACIF. Pero también hubo intervenciones del presidente Arévalo, de la vicepresidenta Herrera y del exvicepresidente Eduardo Stein, de modo que con extractos de todo esto se podría haber hecho un resumen corto para informar a la ciudadanía utilizando internet. De lo contrario nadie se entera. En Colombia todas las declaraciones, intervenciones o discursos del presidente Gustavo Petro y autoridades del gobierno actual son divulgados en forma oficial por los servicios de relaciones públicas de la presidencia de ese país de manera eficiente y bien presentada.

Por otra parte, debemos recordar que, para que se respetara la voluntad popular frente a la intentona golpista, fue decisiva la movilización de los pueblos originarios bajo la conducción de los 48 Cantones y las autoridades ancestrales. En consecuencia, convendría pensar en la posibilidad de elaborar mensajes específicos para informar en los respectivos idiomas autóctonos los logros en las políticas destinadas a estos grupos de población. En ese sentido conviene recordar que uno de los primeros logros en materia de acuerdos del gobierno con los pueblos indígenas se presentó recién instalado el gobierno (el 7 de febrero pasado) en el patio de la paz del Palacio Nacional. Se trata del “Acuerdo Agrario entre el Gobierno y Organizaciones Campesinas” – dentro de las cuales se listaba al CUC,CCDA, UVOC y Nuevo Día – y es del caso destacar aquí que en el marco de la actividad protocolaria correspondiente se llevó a cabo una ceremonia maya en presencia del presidente y autoridades de gobierno. Adrián Zapata, asesor del diálogo, se refirió a los temas del Acuerdo Agrario destacando los entendimientos en materia de atención a la conflictividad agraria; el acceso a la tierra (incluyendo la reestructuración del fondo de tierras); la economía campesina “en su poliactividad” particularmente en lo relativo al desarrollo rural; la articulación territorial así como la creación de “un espacio de comunicación permanente entre el gobierno y las organizaciones campesinas”.  Zapata destacó también el hecho que el acuerdo buscaba recuperar el espíritu de los Acuerdos de Paz de 1996, particularmente el socioeconómico y agrario.  Pues bien, aunque existe un video del evento, es necesario entrar a Facebook para poderlo recuperar y además la hora y media que duró el evento es demasiado tiempo para cualquier persona que tiene que ocuparse de su trabajo normal, de manera que se habría hecho necesario hacer mensajes cortos (uno o a lo máximo dos minutos de duración) para divulgar esto en forma masiva a través de las redes sociales. Sin temor a equivocarnos podemos afirmar que este evento, de gran importancia, pasó desapercibido por la ciudadanía. Y además, si es cierto que – como dijo Zapata – uno de los puntos principales del Acuerdo es el establecimiento de un espacio de comunicación entre el gobierno y las organizaciones campesinas, es del todo pertinente preguntarnos ahora – casi cinco meses después – como ha avanzado el mismo en su cumplimiento. Razón de más para informar a la población a través de los medios apropiados. Es hora que la Secretaría de Comunicación Social de la Presidencia ponga en marcha una política comunicacional apropiada.

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