Este año señores de la corrupción; no se quiere seguir hablando de tanto daño que se ha hecho a nuestra gente, a nuestra nación; Los llamados a externar este criterio son los periodistas con título, trabajo y beneficio social en el IPSP. más no lo hacen porque están en otro interés que no es ver los atropellos de que es víctima el pueblo desposeído, este que vive de las escasas migajas que va dejando la corrupción.
Es tiempo de que cada quien sea responsable de sí mismo y tener la entereza de enfrentar y orientar a los ciudadanos, para que se apeguen a los preceptos democráticos de nación; si eso se hace seguro iremos en el camino hacia el triunfo de dejar de ser esclavos de políticos inescrupulosos que buscan su acomodo económico a base de prebendas y coimas dentro del sistema acomodativo.
En este año 2021 que se fue hubo mucho desmadre gobiernista; incluyendo la no elección de cortes en el legislativo, la famosa elección de magistrados a la Corte de Constitucionalidad y otros dentro del sistema judicial; que están cooptados por los que manejan el sistema corrupto, elección de Junta Directiva del congreso donde se suena que corren los miles de quetzales para comprar voluntades de las bancadas opositoras, donde quedan diputados fieles que nada pueden hacer ante la aplanadora que ostenta el capital del erario nacional. Se forman alianzas para dicho fin.
Los partidillos que ya andan cacareando no tienen credibilidad porque arrastran colas de nefasto pasado donde se han retratado que lo que les interesa es la plata y no crear un sistema que dé bienestar a todos en común; la llamada selección de personas para puestos claves han sido cuestionados porque muchos no tienen la capacidad y han sido señalados de compra de títulos universitarios para integrar el sistema corrupto al cual ellos se prestan en agradecimiento de haber sido seleccionados para el puesto; este que no es por capacidad, es por compadrazgo. Por eso el barco democratico y el estado de Derecho han ido en todos estos años a la deriva por falta de profesionalismo en los órdenes donde se desarrolla el guatemalteco urgido de tantas necesidades que la suciedad política ignora; ellos van tras el objetivo de acumular fortuna sin ver a aun pueblo con niñez en extrema pobreza y desnutrición en el área que abarca la nación.
Las caravanas de migrantes se pueden detener; dando asistencia al ciudadano para que pueda mover el engranaje de la producción según su capacidad y conocimiento para engrosar la economía estatal. Esa debe ser la misión de un gobierno electo popularmente por el pueblo y no por las mafias que se escudan tras el poder para gestar carestía en la subsistencia alimenticia que hoy se ha elevado y difícil es alcanzar un poco de tranquilidad en el hogar sin lo constante amenaza de que comeré mañana y con que lo comprare.
La pandemia y sus variantes nos tiene bajo la amenaza del contagio y falta de empleo bien remunerado para paliar las necesidades que son muchas y nadie las remeda. El gobierno y sus secuaces no ven, celebran acuerdos para bien personal y en ello no entra el pueblo.
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