Hoy es uno de los días más importantes para la población de los Estados Unidos de América y colateralmente de varios países alrededor del mundo, ya que, la hegemonía estadounidense en materia financiera, militar, económica y política se puede ver con los cientos de bases militares en muchos países.
La elección para el ejercicio de la presidencia, según las encuestas internas de ese país e internacionales, indican prácticamente un empate entre ambos contendientes, entrambos se dice que hay diferencia ideológica, pero la percepción de muchas personas conocedoras del ambiente político gringo, dan por sentado que, cualquiera de ellos que gane la elección tiene como objetivo determinado mantener o conseguir más influencia en los mercados internacionales.
Cada vez que acontecen las elecciones en los Estados Unidos, en nuestro país los corrillos políticos se nutren de miles de especulaciones; sean estas derivadas de las conductas de los candidatos, las encuestas estadounidenses o bien inventadas por quienes desean crear en la narrativa, en el ambiente social, en el imaginario guatemalteco la posibilidad de un futuro mejor o peor en caso triunfe cualquiera de los contendientes.
Guatemala, desde hace más o menos unos cien años, tiene una cuasi total dependencia respecto de ese país en los sectores del agro, industria, medicina, tecnología, educación y modernamente, hasta cultural por el influjo de los medios de comunicación y en especial la música vulgar o profana.
Eso ha cambiado en gran medida algunas de las costumbres y tradiciones guatemaltecas, creándose por así decirlo, un sincretismo que cada día se manifiesta como natural y se arraiga entre la población joven que, por ausencia durante muchísimos años de políticas culturales, económicas y sociales de carácter gubernamental que han adoptado dichas formas de vida, en principio, para considerarse a sí mismos como parte de un entorno social y económico diferente al de la mayoría de habitantes chapines y diferenciarse de la masa a la que pertenecen.
¿Qué espera Guatemala del resultado de la elección de hoy en Estados Unidos? La esperanza para el sector social y político ultraconservador que son los verdaderos propietarios de Guatemala, es que el ganador sea el señor Trump; y para el sector que se identifica como demócrata creen que la victoria de la señora Harris le daría a Guatemala algunas ventajas socioeconómicas; cuando en verdad, como país hegemónico Estados Unidos persistirá en ser la potencia que para su beneficio domine la vida en este planeta.
La elección en Estados Unidos es vista como un momento de redefinición para el mundo; en Guatemala en la visión estadounidense fue, es y seguirá siendo el país bananero que constituye uno de sus patios traseros donde su presencia es esencial para múltiples objetivos satisfactores de su mercado y seguridad, en especial lo relativo a la migración y el tráfico de drogas; por lo que, hasta cierto punto, para la mayoría de guatemaltecos resulta irrelevante cuál de los dos candidatos a presidente de esa nación resulte ganador.
¿Qué gana la población guatemalteca con la victoria electoral de alguno de los candidatos a presidente de los Estados Unidos? Hemos vivido tanto tiempo en las sombras económicas, sociales y culturales que, en términos generales, ni fu ni fa en materia electoral estadounidense; de repente se puede lograr una mejor opción de trabajo para miles de guatemaltecos con los programas especiales como el TPS.
La lección que nos dejan las elecciones estadounidenses es que, se da entre dos partidos fuertes y no con el enjambre de mini partidos que no representan a la mayoría de la población guatemalteca.