POR MARIELA CASTAÑÓN
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Tres mujeres fueron atacadas a disparos en un centro nocturno ubicado en la 11 calle 0-66 de la zona 10. Dos de ellas murieron en el inmueble y una falleció al ingresar al Hospital Roosevelt.
A las 04:55 de esta mañana, los Bomberos Municipales informaron del asesinato de tres mujeres. Dos de ellas no fueron identificadas hasta el cierre de esta nota.
Mientras que la otra mujer fue trasladada al Hospital Roosevelt donde murió; fue identificada como Alejandra Alfonso, de 27 años y de nacionalidad venezolana.
Alfonso fue identificada por su novio, Andrés Herrera Marroquín, de 34 años, según los Bomberos Municipales.
Policías Nacionales Civiles (PNC) del Departamento de Delitos contra la Vida y fiscales del Ministerio Público (MP) recopilaron las evidencias que quedaron dentro y fuera del centro nocturno para averiguar qué sucedió.
En ese proceso, entrevistaron a diferentes personas que estaban en el lugar cuando las mujeres fueron asesinadas.
Uno de los trabajadores se limitó a decir que no lograron escuchar si hubo una riña antes, pero cuando abrieron la puerta de uno de los apartados del lugar, encontraron a las dos jóvenes fallecidas.
Algunas personas que se presumen eran familiares o amigos de ellas, llegaron a la escena del crimen para saber qué había sucedido.
TESTIGOS LO CALIFICAN COMO “ANTRO”
Personas consultadas en áreas aledañas al centro nocturno, calificaron este lugar como “un antro”, debido a las características que observan.
De acuerdo con las personas entrevistadas, ese centro podría tener más de 5 años de funcionar y en ese tiempo han observado que a partir de las 7 de la noche, se parquean decenas de vehículos de diferentes modelos. Además, hay música a volumen alto, lo que hace creer que es una discoteca.
En el día un promedio de cuatro personas estaban encargadas de la seguridad.
Los comensales salían incluso hasta las 7 de la mañana del siguiente día, es decir pasaban toda la noche adentro, como en un “after party”, sin mayores controles de las autoridades.
Los vecinos pidieron a la Municipalidad de Guatemala y al Ministerio de Gobernación, a través de la PNC, verificar este y otros lugares similares.
Un usuario de ese centro nocturno, describió que adentro había jóvenes que sospecha eran extranjeras por las características físicas, pero no las dejaban salir.
El MP y la PNC investigan esta información para confirmar qué tipo de negocio era y cómo ocurrieron los crímenes de las mujeres.
