Por Eder Juárez
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El ministro de Economía, Acisclo Valladares Urruela, emitió un comunicado por la denuncia presentada por la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), sobre un caso de “espionajes ilegales” que lo involucran, denuncia que calificó como una “canallada”.

En un comunicado que Valladares Urruela compartió con amigos y familiares, manifestó su indignación y repudio “ante la canallada perpetrada de atribuirme semejante hechos deleznables y exponer públicamente a muchas personas sin la más mínima consideración por ellas; todo para producir un show mediático que se sustenta en documentos que más bien pareciera surgidos de su propia mano”.

De acuerdo con el Ministro de Economía, estos documentos que “claramente se comprenden inventados por la CICIG” habrían sido recolectados por ésta en el allanamiento realizado en su residencia en noviembre de 2017, “sin mi presencia ni la de mi mandatario, a quien no permitieron entrar, violando norma constitucional expresa que ordena esa presencia, les permitió sacar y meter cuanto se quiso, entrando y saliendo personal de la CICIG y MP, e incluso terceros, sin ningún control”.

Asimismo refiere que se ha atropellado a muchas personas por la publicidad dada a lo supuestamente encontrado, publicidad ilegal e impropia de los documentos “inventados o bien obtenidos fraudulentamente en otras partes, uno de los delitos más a los muchos perpetrados y que fueron objeto de la querella impuesta por mí, citada anteriormente”.

“Lamento profundamente que la canallada en mi contra – todo mentira- hayas trascendido a otras personas, triste despedida de los resabios quedados de la Comisión que, equivocando su camino, sin auditoría ni evaluación de sus actuaciones, hubo de extinguirse y confío plenamente en las autoridades judiciales harán justicia en este caso” manifestó Valladares Urruela.

CASO DE ESPIONAJE

La CICIG presentó una denuncia sobre un posible Espionaje y Escuchas Telefónicas Ilegales de TIGO, en el cual se encuentra involucrado Valladares Urruela, cuando fungía como director ejecutivo de dicha empresa. Este caso se encuentra en su fase de investigación y surgió a raíz del caso TIGO en el secuestro de la documentación realizada en el allanamiento a la casa de Valladares Urruela.

Según la CICIG, entre las personas a las que les hizo espionaje y escuchas telefónicas están miembros del Movimiento Semilla, Maria Fernanda Torriello Molina, su exesposa y Niels Erichsen Vargas, a quien le tenían un esquema de llamadas para conocer con quien hablaba, entre ellos varios empresarios y personajes de la política. Asimismo se espiaba a Niklos Nagy Deak, un presunto narcotraficante.

De acuerdo con la CICIG, por los indicios descritos, Valladares Urruela se aprovechó de su alto cargo dentro de la empresa para tener acceso a información sensible de políticos de oposición y particulares vinculados al ámbito empresarial.

Para lograr las interceptaciones ilegales, Valladares Urruela se valía aparentemente de la infraestructura humana y técnica de la empresa TIGO, señala la investigación.

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