Por Redacción La Hora
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Un reporte del The Washington Post destaca que para disuadir los intentos del presidente Donald Trump de imponer aranceles a productos de México como medida de presión para frenar la migración irregular, negociadores del Gobierno de ese país ofrecieron a cambio una represión sin precedentes con el apoyo de tropas de la Guardia Nacional Militarizada en contra de los migrantes centroamericanos.
Asimismo, el artículo destaca que de no tener éxito en reducir los arrestos en la Frontera Sur, las negociaciones incluso podrían llegar a generar otro tipo de medidas.
La publicación destaca que el plan acordado implica el despliegue de hasta seis mil tropas de la Guardia Nacional Militarizada en la zona fronteriza con Guatemala, lo que conllevaría miles de arrestos adicionales de migrantes por semana y la aceptación de solicitantes de asilo rechazados por EE.UU., acciones con las que buscan ambos países responder a la crisis humanitaria que funcionarios estadounidenses han señalado en la Frontera Sur.
En conferencias y redes sociales, funcionarios han descrito el acuerdo como “un gran avance” y hasta Trump destacó que el plan era suficientemente agresivo para suspender su amenaza de incrementar aranceles.
MEDIDAS SE ADOPTARAN DURANTE GOBIERNO DE MANUEL LÓPEZ OBRADOR
El Post destaca que las acciones, descritas por funcionarios y que han sido plasmadas en documentos recopilados relacionados a las negociaciones, aparentan ser las medidas más sustanciales promovidas desde el gobierno de México, e incluso describieron en documentos que era “la primera vez” en la historia reciente que toman control operativo de esta manera.
Por otro lado, resaltan el cambio notorio del presidente Andrés Manuel López Obrador, quien el año pasado crítico y rechazó el intento de reforzar las medidas en contra de migrantes.
Los documentos del acuerdo actual hasta ahora se mantienen en reserva.
Otra de las propuestas que surgió era que migrantes que solicitan asilo en EE.UU., realizarían su petición en el primer país extranjero al que lleguen después de abandonar el de origen, lo que haría que los guatemaltecos se queden México y desde ahí desarrollen su proceso, mientras que los hondureños y salvadoreños retornaría a Guatemala, sin embargo, la propuesta no ha recibido un visto bueno del todo.
GUATEMALA HABRÍA ACEPTADO RECIBIR CASOS DE ASILO
No obstante, de no tener éxito el plan de represión acordado, Trump podría volver a reactivar su amenaza de imponer aranceles para obtener medidas más fuertes.
El ofrecimiento de autoridades mexicanas, busca reducir sustancialmente los arrestos en la Frontera Sur, que ya supera las cifras de 500 mil personas, principalmente originarias de Guatemala y Honduras en ocho meses del año fiscal 2019.
“En las últimas semanas, funcionarios de EE.UU. han estado enviando a aproximadamente 250 solicitantes de asilo por día de regreso a México. Según el acuerdo alcanzado…, los funcionarios estadounidenses dijeron que esperan aumentar la tasa a mil personas diarias”, cita el Post.
Por otro lado, el vicepresidente Michael Pence, expresó que se habría alcanzado un acuerdo de “tercer país seguro” con Guatemala, con lo que se obligaría a hondureños y salvadoreños a pedir asilo en el país, en lugar de viajar hacia el norte, acción que se implementaría solo si llegará a ser necesario.
EBRARD PIDIÓ SOLIDARIDAD A PAÍSES INVOLUCRADOS
El ministro de relaciones exteriores de México Marcelo Ebrard, por otro lado explicó en una conferencia que de no obtener los resultados esperados, los países de la región tendrían que hacer un pacto para que la cantidad de migrantes no aumente, por lo que les pidió solidaridad.
«Brasil porque ahí es donde la gente llega desde fuera del continente. Panamá porque allí es donde llegan los cubanos y los haitianos, Guatemala porque allí es donde los hondureños y los salvadoreños pasan. Es un sistema regional», dijo Ebrard, en declaraciones citadas por el Post.