Por Grecia Ortíz
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El informe anual de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y de la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de 2018, señala que Guatemala estuvo marcada por diferentes situaciones, entre las que destacan constantes ataques del presidente Jimmy Morales hacia medios de comunicación y otros funcionarios que han cuestionado a la prensa por su actuar.
De acuerdo con el informe, luego de ocurrida la erupción del Volcán de Fuego, Morales cuestionó públicamente la labor de prensa y la acusó de sembrar pánico, además de generar Fake News.
Otro de los hechos reportados por la CIDH, también destaca la intimidación que han vivido reporteros en otras oportunidades.
Entre otros aspectos la CIDH, resalta que la decisión de no renovar el mandato de Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), ha provocado una crisis institucional que ha sido observada por la comunidad internacional como un aspecto negativo.
“De acuerdo con información de público conocimiento, el 16 de septiembre, personal de la Policía Nacional Civil habría intimidado a reporteros de diversos medios de comunicación durante la cobertura que realizaban frente a la sede de la CC sobre la eventual resolución del Tribunal Constitucional respecto de la prohibición del ingreso a Guatemala del comisionado Iván Velásquez, titular de la CICIG)”, apunta el informe de la CIDH.
RELATORÍA ESPECIAL RECUERDA DEBER DE FUNCIONARIOS PÚBLICOS
Según la información, altas autoridades estatales durante 2018, también habrían mantenido una retórica de confrontación contra la prensa, criminalizando opiniones en redes sociales.
Asimismo, la Relatoría Especial recuerda que los funcionarios públicos tienen el deber de asegurarse que con sus pronunciamientos no lesionan los derechos de quienes contribuyen a la expresión y difusión de su pensamiento.
El informe, también explica que no se observaron avances en el país en cuanto a excesivos niveles de concentración en la propiedad y control de medios audiovisuales en especial de la televisión abierta, que ya se habían documentado en 2017.
El documento además hace referencia a otros países y sobre la situación de prensa durante 2018.
