Por Margarita Girón
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La Casa del Migrante en Guatemala atendió anoche a 1,293 migrantes de origen hondureño que forman parte de la nueva caravana que salió el martes del país vecino hacia Estados Unidos. Ante la emergencia, representantes del refugio piden a la población solidarizarse con los mismos durante su paso por Guatemala.

Carlos López, representante de Casa del Migrante, indicó que al momento han tenido comunicación con otras sedes de la organización que espera que al menos 500 migrantes más lleguen a la capital durante el día. Esta situación ha desabastecido al refugio y piden a organizaciones y a la ciudadanía para que puedan donar alimentos como: huevos, arroz, frijol, café, pan y alimentos enlatados. Asimismo, kits de limpieza e higiene personal.

López añadió que debido al clima, los migrantes presentan resfriados, por lo que es necesario suministrarles antigripales, antiinflamatorios y analgésicos, por lo que solicitan apoyo para atenderlos.

MÁS DE MIL MIGRANTES FUERON ATENDIDOS

López dijo que debido a que la capacidad del refugio fue rebasada anoche, solicitaron apoyo de la ciudadanía y organizaciones para atender la emergencia. De acuerdo con datos registrados por Casa del Migrante se atendieron 1,293 migrantes, el 70 por ciento de ellos fueron hombres adultos y el resto estuvo distribuido entre mujeres y niños.

En este tema, López destacó que fue a través de la Asociación de Estudiantes Universitarios Oliverio Castañeda de León, de la Universidad de San Carlos (AEU), que se habilitó el Paraninfo Universitario, ubicado en la zona 1 capitalina para resguardar del frío a cerca de 800 migrantes que no lograron ingresar a Casa del Migrante.

Asimismo, indicó que fue necesario movilizar a los migrantes en buses y proporcionarles alimentos y abrigo mientras permanecían en el Paraninfo. Además, destacó que mientras esperaban, algunos ciudadanos llegaron en buses para compartir alimentos con los migrantes.

“Ellos no se querían ir de aquí, se querían quedar en la calle pero estaba haciendo demasiado frío, no podíamos hacer mucho porque la casa estaba llena, cuando los alimentos preparados se agotaron empezamos a compartir galletas, jugos y suero para los migrantes”, resaltó López.

Además, agregó que otro grupo fue trasladado a un albergue habilitado por los Franciscanos en Villa Lobos I y a la Dirección General de Educación Física que también fue habilitada para el resguardo de los migrantes.

SIN APOYO

El representante de Casa del Migrante, explicó que aunque el personal de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred), sostuvo una reunión con representantes del refugio, indicaron que no contaban con espacio ni insumos para atender la emergencia.

“Anoche vino personal de Conred, para preguntar cuántas personas habían pero de entrada dijeron que no cabía nadie más en los albergues”, añadió.

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