Por Eder Juárez
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El último año del gobierno del presidente Jimmy Morales coincidirá con las elecciones generales, elecciones de la Corte Suprema de Justicia, Cortes de Apelaciones entre otras. Estos eventos podrían verse marcados por el clientelismo político que el Ejecutivo podrá usar para su propio partido o para apoyar a otro, señalan analistas consultados.

Karin Slowing, exsecretaria de Planificación y Programación de la Presidencia (Segeplan), indicó que para este año a los ciudadanos les interesa que el Estado invierta en el desarrollo de las personas, sin embargo, lamentó que eso no sucederá.

La tónica del gobierno de Morales será la misma para el año electoral, con excepción de que se verán inversiones políticas; es decir que con ministerios se puedan favorecer el clientelismo electoral, como el Ministerio de Desarrollo con la entrega de algunos artículos o el Ministerio de Agricultura con la entrega de cupones, serán más activas en sus acciones.

“Ese tipo de actividad clientelistas que el Gobierno puede desarrollar utilizando la institucionalidad y recursos públicos a favor de un partido o candidato son las que se verán este último año de Gobierno, pero acciones que necesita el país en términos de desarrollo o inversión no se verá nada”, señaló la analista.

Por su parte, María Del Carmen Aceña del Centro de Investigaciones Económicas Nacionales (CIEN), indicó que esperan que el Gobierno no gaste más de los recursos que tiene, porque el problema que se ha visto en gobiernos anteriores es que en el último año realizan proyectos que consumen los recursos disponibles dejando a la siguiente administración sin fondos y con deudas.

“Hay que estar atentos a que no se les vaya de las manos el gasto público, los primeros seis meses en la época que no llueve puedan reconstruir algunas carreteras y que se cumpla lo del plan de Presupuesto”, dijo.

Aceña advierte que posiblemente se pueda firmar otro Pacto Colectivo con el magisterio y otras instituciones como favores políticos que afectan la economía del país.

Asimismo, dijo que se verá el clientelismo político porque no se ha generado la capacidad de prevenir la corrupción. “la corrupción se previene con sistemas y normativas, sin embargo; se tiene la misma Ley de Servicio Civil, Ley de Contrataciones que no funciona, la Ley de la Contraloría no se ha modernizado entonces se inicia a contratar a varias personas para beneficiar a un determinado partido político, algo que es muy negativo para el país”, señaló la analista.

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