POR MARIELA CASTAÑÓN
mcastanon@lahora.com.gt
Tras la salida de Francisco Rivas del Ministerio de Gobernación (Mingob) y de Juvell de León del Sistema Penitenciario (SP), se desconocen los avances en la implementación del Nuevo Modelo de Gestión Penitenciaria que tenía como propósito inicial trabajar en cinco cárceles donde se evitara el ocio, el hacinamiento y la corrupción.
Rivas había anunciado que priorizaría el proyecto del Nuevo Modelo de Gestión Penitenciaria. Uno de los centros inaugurado bajo ese esquema fue Fraijanes I, el 7 de marzo de 2017; en este lugar fueron ubicadas mujeres con un perfil de peligrosidad bajo y con voluntad de reinsertarse y rehabilitarse.
La prisión ya existía y albergaba a miembros del Barrio 18, quienes fueron trasladados a otra cárcel. Este lugar fue remozado y se creó un cronograma de actividades que empezaba a las 06:30 horas y concluía a las 22:00. Aquí estaba previsto promover aprendizaje en belleza, panadería y computación.
Después de la inauguración de este centro se planificó continuar con otras prisiones, sin embargo ya no fue posible. Actualmente se desconoce la implementación del proceso del Nuevo Modelo de Gestión Penitenciaria.
La Hora solicitó la semana pasada una entrevista con el director del SP, Camilo Morales, pero hasta hoy no se ha logrado ese espacio.
Morales asumió el pasado 30 de julio en la Dirección del SP, en sustitución de Juvell de León, quien fue nombrado por Rivas en agosto de 2017.
LA SITUACIÓN DE LAS CÁRCELES
De acuerdo con el SP, actualmente hay 24 mil 424 personas privadas de libertad en los 21 centros carcelarios, sin embargo, solo hay 6 mil 809 espacios carcelarios. La situación evidencia que hay un déficit de 17 mil 615 espacios.
Por otro lado, los problemas y violencia dentro de las cárceles continúan, principalmente en aquellas donde hay mayor hacinamiento.
El pasado domingo, el reo Walter Barahona Castillo, de 40 años, fue herido con arma de fuego en la Granja Penal Pavón y fue trasladado al Hospital General San Juan de Dios.
Barahona fue agredido por otros presidiarios que pretendían robarle Q10 mil, producto de la venta de cerdos en la prisión, según los reportes policiales.
La mayoría de negocios o de fuentes de empleo son implementados por los propios reclusos, no por el SP, por tanto, no hay control ni oportunidades para todas las personas.
Recientemente Corinne Dedik, investigadora del Centro de Investigaciones Económicas Nacionales (CIEN), destacó que es necesario implementar tres acciones urgentes: invertir en infraestructura carcelaria, depurar al personal operativo y continuar con el Nuevo Modelo de Gestión Penitenciaria que se quedó estancado.