Por Margarita Girón
jgiron@lahora.com.gt

Las ganas de salir delante de los chapines son actualmente uno de los motores de desarrollo que mantienen al país. Cada día son más los guatemaltecos emprendedores que buscan oportunidades para generar ingresos, mejorar y expandirse para llegar a otros mercados.

Fredy Rolando es un guatemalteco emprendedor originario de San Juan Comalapa, Chimaltenango. Su historia es un ejemplo de lucha constante. A través de la producción y comercialización de la miel el connacional ha logrado crear una fuente de ingresos para él y su familia. En una entrevista para La Hora Voz del Migrante, Fredy relató cómo aquello que un día fue una travesura de niños, hoy se ha convertido en su principal fuente de ingresos.

Fredy dijo que Miel Rocío surgió de una travesura que cometió cuando era niño; por el año 1989, “todas las tardes jugábamos y con unos amigos vimos unas colmenas y aunque mis compañeros de juego pretendían ahuyentar a las abejas, yo les dije que no lo hicieran porque no molestaban a nadie, pero me quedé con la inquietud al ver que eran bastantes”.

Fredy expresó que su abuelo se encargó de su crianza luego que su progenitora decidiera abandonarlo, de su padre solo destacó su ausencia, pero gracias a su abuelo encontró una forma de crear sus propias oportunidades. Así que, esa tarde al regresar a su casa, avisó a su abuelo sobre el hallazgo de las colmenas y así nació la idea de trabajar la miel.

Con esfuerzo adquirieron una caja para colmena por Q20, Fredy relató que en ese entonces un jornalero ganaba Q1.25 al día, por lo que el costo de la caja era alto para sus posibilidades. Su abuelo años atrás había trabajado como apicultor y conocía un poco el proceso. “Nosotros no sabíamos y bajamos el enjambre como pudimos, esa vez si nos picaron, tuvimos que intentar tres veces hasta que las abejas se quedaron”.

Fredy detalló que tiempo después su familia se unió al negocio y aunque con los años cada uno tomó un rumbo diferente, aún trabajan como apicultores en San Juan Comalapa.

MIEL ROCÍO
El proyecto nació en la aldea Pamumús, de San Juan Comalapa, buscar el nombre para el emprendimiento fue una tarea que Fredy decidió tomar, “Pamumús es de origen cakchiquel, antes se caracterizaba por ser una tierra en donde el clima era lluvioso y podía observarse cada mañana el rocío sobre los campos, por eso yo decidí utilizar la palabra Rocío para mi negocio, porque desde acá de produce”, dijo Fredy.

Con el tiempo la producción fue creciendo y llegó a mercados locales, en donde se ha comercializado con éxito; sin embargo, la visión de Fredy va más allá y actualmente busca expandirse fuera de Guatemala.

“Nosotros ofrecemos un proyecto natural que no tiene químicos, sacamos hasta 7 cosechas al año de miel, el proceso de cada cosecha dura aproximadamente un año por eso los vamos rotando para no quedarnos sin producción”, dijo el emprendedor.

Fredy relató que factores climáticos podrían afectar la producción de la miel, “si no hay agua la producción escasea, entre diciembre y febrero la producción sale y es donde aprovechamos”, acotó el connacional.

En el envasado participan la esposa y sobrinas de Fredy. El proceso no implica trabajo duro, pero si cuidado al sacar la miel y envasarla.

Ruth Noemí, sobrina de Fredy, dijo que el emprendimiento ha dado oportunidad de trabajo para ella y su familia. Hay jornadas largas, ya que durante el día pueden empacar hasta 50 botellas.

“Yo soy madre soltera y que ellos me den trabajo es muy importante porque así puedo sostener a mi hija, a veces las oportunidades para una mujer son limitadas, a mí me ha gustado bastante, yo ya conocía el proceso porque trabajé en una fábrica y ahora lo hago en la empresa familiar”, dijo Ruth.

Además de la miel han innovado su producción promoviendo la elaboración de shampoos, polen de abeja, miel blanca y otros productos que han desarrollado a través de proyectos comunitarios.

De acuerdo con Ruth, una de las razones por las que buscan llegar a mercados fuera del país es porque a nivel local han encontrado tropiezos, desde negocios monopolizados hasta discriminación. Miel Rocío actualmente se distribuye en algunos restaurantes del Altiplano y en negocios de Chimaltenango.

ES POSIBLE SALIR ADELANTE EN GUATEMALA
Fredy señaló que aunque no se generen los ingresos que quisiera en Guatemala es posible salir adelante trabajando, consideró que quienes han decidido buscar oportunidades en otro país son valientes, pues no es fácil abandonar la tierra donde han crecido por buscar fuentes de ingresos que no encuentran en Guatemala.

“A donde llega uno hay posibilidades de hacer vida, así como lo hacen nuestros hermanos en otros lugares, así lo hacemos nosotros en Guatemala”, indicó en entrevistado.

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