POR MARIELA CASTAÑÓN
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El Ministerio de Gobernación (Mingob) analiza quién sustituirá a Kamilo Rivera, exviceministro de Seguridad, quien presentó su carta de renuncia el pasado miércoles por “recomendaciones médicas”. Rivera tiene una orden de captura por ejecución extrajudicial y está prófugo desde el lunes.
Fernando Lucero, portavoz del Mingob, explicó que todavía “no hay nombres” de las personas que podrían ocupar el cargo que dejó Rivera.
El pasado miércoles, el exviceministro presentó su carta de renuncia y argumentó que “por razones de fuerza mayor, por recomendaciones médicas personalísimas, de carácter privativo” se le imposibilitaba continuar en el cargo.
PRÓFUGO DESDE EL LUNES
El pasado lunes, la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) y la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI) del Ministerio Público (MP) presentaron un caso de ejecuciones extrajudiciales y torturas, que data del año 2004 al 2007.
Según esas instituciones, existen siete nuevos hechos cometidos por una estructura dedicada a la ejecución extrajudicial en ese periodo de tiempo y por los cuales vinculan a Rivera y a siete personas más.
CUESTIONAN EVASIÓN
Carmen Rosa de León, del Instituto de Enseñanza para el Desarrollo Sostenible (Iepades), cuestionó la fuga de Rivera, quien contaba con seguridad de la Policía Nacional Civil (PNC) por ser un funcionario.
A criterio de la entrevistada, la evasión de Rivera es cuestionable porque debe cumplir con la Ley y por tanto deberían existir agravantes.
“Para nosotros es increíble que sea un funcionario encargado de cumplir la Ley y que en lugar de ponerse a disposición de las autoridades, esté en fuga. Eso nos da una imagen de cuál es el compromiso con la justicia y la seguridad del equipo del Mingob”, indicó la representante de Iepades.
La profesional ve intención de proteger a Rivera; destacó que el presidente Jimmy Morales, el ministro de Gobernación, Enrique Degenhart y el director de la PNC, Erwin Tzi, debieron ordenar y ejecutar la captura, sin embargo, no lo hicieron.
“Están en una posición de no hacerse cargo del asunto, aceptar una renuncia por enfermedad cuando está con una orden de captura es ridículo, además, quiere decir que todos los jefes están de acuerdo con que esté prófugo y se oculte”, reiteró.
Por su parte el Mingob respondió por ese señalamiento: “La persecución penal es personalísima. Ni las autoridades ministeriales, ni el Ministerio de Gobernación protegen a personas sujetas a casos penales y/o con orden de captura”.
