De aprobarse de nuevo el transfuguismo, prohibido en 2016, las Elecciones Generales de 2019 podrían verse empañadas por partidos políticos debilitados, generar retrocesos y habilitar la posibilidad de que sean reelegidos diputados dispuestos a negociaciones espurias, según explicó a “La Hora” el experto en política Renzo Rosal.
POR HEDY QUINO
hquino@lahora.com.gt
El politólogo Renzo Rosal explicó que las reformas que se aprobaron en 2016, en las que se prohibió el transfuguismo, fue una muestra positiva para eliminar esa práctica “nefasta” en el país. De reactivarse, el debilitamiento de los partidos políticos continuaría.
“Con esto se daría vigencia de nuevo a una práctica tradicional que no solo erosiona a las organizaciones políticas, sino permite a los diputados tránsfugas continuar en el poder”, añadió.
Rosal detalló que la mayoría de congresistas que recurren a esta práctica son los que están más dispuestos a realizar negociaciones espurias, y en su mayoría se ven involucrados en actos de corrupción, “son los peores”.
RETROCESO
“Revivir el transfuguismo implica retroceder, dar marcha atrás con ese intento de perfeccionar los partidos políticos, es echar por la borda aquellos pequeños resultados que se han obtenido”, apuntó.
De aprobarse de nuevo el transfuguismo, las elecciones 2019 estarían plagadas de tránsfugas que buscarían su reelección, y el camino para obtener de nuevo una curul sería más fácil, subrayó Rosal.
EL CRIMEN ORGANIZADO TAMBIÉN SE BENEFICIARÍA
El experto explicó que no solo los diputados se beneficiarían con la aprobación del transfuguismo, pues sus operadores continuarían con su cuota de poder dentro del Congreso.
Esto debido a que estructuras criminales otorgan financiamiento electoral a candidatos a diputados, detalló.
“Los actores del crimen organizado estarían muy complacidos con esta reforma, pues sus operadores a lo interno del Legislativo continuarían defendiendo sus intereses”, subrayó Rosal.
DEBILITA LA DEMOCRACIA
Otra de las consecuencias de aprobar el transfuguismo es el debilitamiento de la democracia. Esto porque continuarían las mismas personas que han demostrado que no les interesa trabajar por la población sino solo sus intereses personales. “Ellos van a continuar con sus negociones y debilitando el sistema democrático del país”, concluyó el politólogo.
ASIES: REFORMAS A LA LEPP NO DEBERÍA LIMITARSE AL TRANSFUGUISMO
Para el analista Pablo Hurtado, de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (Asies), las reformas a la Ley Electoral y de Partidos Políticos se debe analizar y discutir de manera integral y no sólo enfocarse en el artículo 205 Ter, que contempla el transfuguismo.
«Con las debilidades que tiene nuestro sistema de partidos políticos, difícilmente una norma puede solucionar los problemas estructurales», señaló Hurtado.
El experto indicó que más allá del transfuguismo, lo ideal es hacer una profunda revisión del sistema de partidos políticos, así como buscar y asegurar mecanismos de democracia interna.
Por otro lado el consultor resaltó que el resto de reformas también preocupan, pues algunas no están bien planteadas y de ser aprobadas generaría una situación delicada en el proceso electoral.
«Por aprobar el 205 Ter se aprueben el resto de artículos sin un debido análisis y que estos lleguen a entrar en vigencia en las próximas elecciones, la capacidad del Tribunal Supremo Electoral para implementarlas se vería amenazada», explicó.
FCN REFORZÓ SU BANCADA CON DIPUTADOS TRÁNSFUGAS
El partido político que llevó a la presidencia a Jimmy Morales, Frente de Convergencia Nacional (FCN-Nación), logró colocar en el Congreso a once diputados, aunque una de sus promesas de campaña fue que no recibirían a legisladores de otros partidos, al llegar al poder esto cambió.
Actualmente el bloque oficial está conformado por 36 parlamentarios, 25 tránsfugas. De estos siete no cuentan con antejuicio por estar involucrados en un caso de discriminación.
Por otro lado se encuentran las bancadas Movimiento Reformador (MR), con trece integrantes y Alianza Ciudadana (AC), con once. Ambas están conformadas por diputados tránsfugas.
¿QUÉ DICE LA LEY VIGENTE?
El artículo 205 Ter de la Ley Electoral y de Partidos Políticos contempla la prohibición de esa práctica parlamentaria que tanto rechazo ha generado por la ciudadanía.
“Se entenderá por trasfuguismo el acto por el cual un diputado, renuncia a un partido político, habiendo sido electo o cuando ya está ejerciendo el cargo, mediante sufragio universal, para un período, y estuviere designado en uno de los órganos establecidos, automáticamente cesa en el cargo del órgano del Congreso que integrare, el cual será asumido por un diputado del partido representado; el renunciante no podrá optar a ningún cargo dentro de los órganos del Congreso de la República”, dice la ley.
“Queda prohibido a las organizaciones políticas y a los bloques legislativos del Congreso de la República recibir o incorporar a diputados que hayan sido electos por otra organización política.”, concluye.
PLANEAN REVIVIR EL TRANSFUGUISMO
La próxima semana los diputados planean presentarle al Pleno una propuesta para aprobar la legalidad del trasfuguismo, asegurado así su reelección para el próximo año.
Por medio de una enmienda de curul los legisladores intentarán pasar esta reforma, aprovechando que el Congreso retomó la aprobación de las nuevas reformas a la LEPP, tras obtener un dictamen de la Corte de Constitucionalidad (CC). Se conoce que el fin de la aprobación de esta iniciativa es ser una moneda de cambio dentro del Congreso que abriría la puerta al aval de reformas que dificultarían la lucha contra la corrupción; entre ellas se contemplan cambios al antejuicio y a la tipificación de la pena del delito de financiamiento electoral ilícito y en su modalidad de anónimo.
Actualmente existe una iniciativa que presentó el legislador Luis Hernández Azmitia, que busca revivir el trasfuguismo. La reforma dice: “Queda prohibido a las organizaciones políticas y a los bloques legislativos del Congreso de la República recibir o incorporar a diputados que hayan sido electos por otra organización política, prohibición que será aplicable por tres años a partir de realizada la elección general”.
En esta misma línea podría ir la enmienda que presentarán algunos diputados. Esto después que la CC en 2016 envió una opinión técnica al Legislativo aduciendo que la prohibición del trasfuguismo era viable de la forma que plantea la propuesta de Azmitia.
Los parlamentarios interesados en legalizar el trasfuguismo se acuerpan del dictamen de la CC para llevar acabo su cometido.
EL ARTÍCULO ORIGINAL, CONFORMADO POR DOS PÁRRAFOS, DECÍA ASÍ:
“Se entenderá por trasfuguismo el acto por el cual un diputado renuncia a un partido político, habiendo sido electo o cuando ya está ejerciendo el cargo, mediante sufragio universal, para un período, y estuviere designado en uno de los órganos establecidos, automáticamente cesa en el cargo del órgano del Congreso que integrare, el cual será asumido por un diputado del partido representado; el renunciante no podrá optar a ningún cargo dentro de los órganos del Congreso de la República.
“Queda prohibido a las organizaciones políticas y a los bloques legislativos del Congreso de la República, recibir o incorporar a diputados que hayan sido electos por otra organización política, prohibición que será aplicable por tres años a partir de realizada la elección general”.
En su resolución, la Corte de Constitucionalidad señala que es viable permitir a los diputados cambiarse de bancada o partido político en el cuarto año, porque de lo contrario se estaría incumpliendo el inciso b del artículo 136 de la Constitución Política de la República de Guatemala que señala que todo guatemalteco tiene derecho a elegir y ser electo.
“Es acertada la propuesta respecto a que tal prohibición persista durante tres años, con el objeto de garantizar que, el último año -cuarto-, en aras de tutelar el derecho político a ser electo -establecido en la literal b) del artículo 136 constitucional-, cualquier parlamentario tenga el derecho a postularse para el siguiente evento electoral, lo cual es viable dentro del marco del sistema de gobierno democrático. De esa cuenta, la propuesta de adición del segundo párrafo del artículo 205 Ter resulta constitucional”, indicó la CC en su resolución.
“Revivir el transfuguismo implica retroceder, dar marcha atrás con ese intento de perfeccionar los partidos políticos, es echar por la borda aquellos pequeños resultados que se han obtenido”.
“Con esto se daría vigencia de nuevo a una práctica tradicional que no solo erosiona a las organizaciones políticas, sino permite a los diputados tránsfugas continuar en el poder”.
“Los actores del crimen organizado estarían muy complacidos con esta reforma, pues sus operadores a lo interno del Legislativo continuarían defendiendo sus intereses”.
Renzo Rosal, analista independiente