Por Eder Juárez y Hedy Quino
ejuarez@lahora.com.gt y hquino@lahora.com.gt
El jefe de la bancada del Frente de Convergencia Nacional (FCN-Nación), Javier Hernández, calificó como berrinche la decisión de la Organización de Naciones Unidas (ONU), de mantener al frente de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) a Iván Velásquez, quien dirigirá a ese ente desde afuera, mientras se aclara la situación en país.
«Es un berrinche de Naciones Unidas, yo creo que ya nos estamos dando cuenta que se está vulnerando y polarizando Guatemala por una decisión de un organismo internacional», afirmó Hernández sobre la postura del Secretario.
Por su parte, el presidente en funciones del Congreso de la República, Felipe Alejos, indicó que no tiene conocimiento de las comunicaciones oficiales entre el Gobierno y la ONU, sin embargo, dijo que todo se rige bajo la Convención de Viena en su artículo 41, que habla de la no injerencia en asuntos internos del país.
“Los Embajadores, los Ministros de Relaciones Exteriores se deben abstener de meterse en política interna de nuestro país, porque así como Guatemala respeta su país ellos nos tienen que respetar a nosotros, ese es un principio de reciprocidad que existe dentro de la diplomacia; entonces en ese sentido como dijo el Presidente, Guatemala será amigo de quienes son sus amigos”, manifestó Alejos.
DECISIÓN DE ONU NO ESTABA EN ESCENARIO DEL GOBIERNO
Ayer el Secretario General ONU, António Guterres, le solicitó al jefe de la CICIG, Iván Velásquez continuar al frente de la Comisión desde afuera de Guatemala hasta que haya más claridad sobre la situación.
El Secretario General también instó al Gobierno de Guatemala a que continúe buscando una solución mediante el diálogo en el marco del artículo 12 del Acuerdo por el que se establece la CICIG.
De acuerdo con analistas consultados, la petición de Guterres no tendría alguna repercusión a corto plazo sobre las investigaciones que realiza el ente internacional en conjunto con el Ministerio Público (MP) además de que es una respuesta que no esperaba el Ejecutivo.
Jahir Dabroy, de la Asociación de Estudios e Investigaciones Sociales (Asies), indicó que la decisión de la ONU no estaba en los escenarios que tenía el Ejecutivo, sobre todo en función de la forma en que se presenta la nota del día viernes en la que se pedía no renovar el mandato de la CICIG y lo que se refuerza con el hecho de impedir el ingreso del Comisionado al país, en que se demandó el nombramiento de un nuevo Comisionado.
“Este escenario de que Iván Velásquez continúe ligado al tema de CICIG, e incluso realizando su trabajo desde afuera en lo que Naciones Unidas planteó como una revisión a los hechos y tratados para ver si no se estaban cometiendo faltas de parte del Estado de Guatemala, es totalmente viable y procedente. Lo que ahorita están demandando a nivel del Consejo de Seguridad de parte del Ejecutivo es tratar de buscar una contrarrespuesta porque es un hecho que la CICIG continuará ejecutando varios casos”, dijo Dabroy.
Mario Polanco del Grupo de Apoyo Mutuo (GAM) considera que hay equipos de la Comisión que trabajan en conjunto con el MP y por ende no se debilitarán las investigaciones, sin embargo, genera alguna preocupación el hecho de un debilitamiento a largo plazo de la CICIG.
Por su lado Carmen Aida Ibarra, del Movimiento Pro Justicia, indicó que la situación viene a cambiar de manera abrupta la rutina de trabajo que traía la Comisión. Para los casos ya presentados ante la justicia esperamos sea sólida, dijo.
Por otro lado, afirmó que el impacto de que el Comisionado Velásquez esté trabajando desde afuera no será significativo, porque sigue trabajando el equipo del MP precisamente la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI), pero advierte que el boicot a la Comisión continuará, no solo de parte del presidente Jimmy Morales, sino de otros actores que han estado en contra de la CICIG.