El Foro de Organizaciones Sociales Especializadas en Temas de Seguridad (FOSS), realizó un análisis de la situación de la Policía Nacional Civil (PNC) en Guatemala y destacó la crisis institucional por la que atraviesa, producto del proceso sistemático de desmantelamiento instaurado por el ministro de Gobernación, Enrique Degenhart.

POR MARIELA CASTAÑÓN
mcastanon@lahora.com.gt

De acuerdo con el FOSS, el desmantelamiento comenzó con la destitución del exdirector de la PNC, Nery Ramos; el exdirector general adjunto, Ervin Mayen; el exsubdirector de Investigación Criminal, Stu Velasco y del exsubdirector de operaciones y después ascendido a director general adjunto, Rony Espinoza.

Continuó con las remociones de otros mandos superiores como Nery Benito, Yotzaida García y Emma Pérez, exsubidrector de Investigación Criminal y exsubirectoras de Análisis e Información Antinarcótica, y de Estudios y Doctrina respectivamente, entre otros. La mayoría de personas despedidas había recibido capacitación especializada en programas financiados por Estados Unidos y otros países donantes.

Aunado a esto se suma la intención de incorporar a militares a las filas de la PNC, que contraviene uno de los compromisos del Plan de la Alianza para la Prosperidad, el cual establece la salida del Ejército de la seguridad ciudadana, explicó Carmen Rosa de León, del Instituto de Enseñanza para el Desarrollo Sostenible (Iepades), organización que junto al Centro de Estudios de Guatemala (CEG), el Instituto de Estudios Comparados en Ciencias Penales (ICCPG), Seguridad en Democracia (Sedem) y el Instituto de Problemas Nacionales de la Universidad de San Carlos (Ipnusac) conforman el FOSS.

El informe agregó que el retiro de los agentes de la policía asignados a la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) y la fuga de información de operativos también es parte de la estrategia de desmantelamiento.

«El haber obtenido, gracias a la formación profesional e inversión de cooperación, una eficiencia notable en materia de investigación criminal, la cual fue clave para apoyar al MP y a la CICIG y su éxito en lograr que varias cabezas de esas estructuras paralelas y cómplices de la cooptación del Estado quedaran al descubierto, hizo que la PNC se convirtiera en el enemigo de los corruptos, y de ahí, la  necesidad de destruir su capacidad de investigación y su profesionalización», refirió el FOSS.

RETROCESO

Carmen Rosa de León describió el desmantelamiento de la PNC como “un paso gravísimo y un retroceso a la seguridad ciudadana”. Detalló que se esperaron 20 años para establecer una policía profesional, sin embargo, la institucionalidad aún es débil, porque en pocos meses Degenhart ha podido desmontar los avances que se habían dado.

NO RESPONDE

La Hora buscó una postura del ministro Enrique Degenhart, pero no respondió a las llamadas realizadas a su teléfono celular.

Artículo anteriorOperativo contra extorsiones deja 17 capturas
Artículo siguienteUNE señala a Conjuve de contrataciones irregulares