POR EDER JUÁREZ
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Ayer el jefe de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) Iván Velásquez dijo durante una jornada de capacitación al personal del Tribunal Supremo Electoral (TSE) que la unidad de fiscalización del financiamiento de los partidos políticos debe funcionar adecuadamente para el próximo año electoral.
“Para nosotros es fundamental que la unidad de fiscalización del financiamiento de los partidos políticos esté fortalecida para el próximo año electoral. La corrupción se vale de la debilidad de las instituciones”, manifestó Velásquez.
De acuerdo con el Comisionado es fundamental que dicha unidad funcione adecuadamente porque esto además fortalece la democracia y “con una democracia fortalecida toda esta gran corrupción que constantemente hemos venido observando e investigando en el país forzosamente tiene que disminuir… porque la corrupción se vale de esa debilidad, la corrupción se vale de la falta de mecanismos de control, de la comodidad, de la indolencia o simplemente de cumplir una función formalmente”, dijo.
FORTALECIMIENTO ES POSITIVO
José Carlos Sanabria, de la Asociación de Investigaciones y Estudios Sociales (Asies), indicó que desde la perspectiva de fortalecimiento institucional es necesario que el Tribunal como órgano electoral tenga la capacidad para implementar las diferentes fases, procesos y actividades que conllevan el evento electoral.
Según Sanabria, dado el contexto político de lucha contra la corrupción y los cambios que se están dando en el sistema, es necesario contar con un TSE con capacidad de controlar y fiscalizar los recursos que utilizan las organizaciones políticas que utilizan en campaña.
«Es importante para consolidar el sistema, la pureza del proceso electoral y para tener certeza y legitimidad sobre los resultados que el TSE tenga las capacidades para poder cumplir con sus funciones, vemos positiva la acción. En este caso indudablemente habrá grupos y sectores que critican y se oponen a esta medida. Es manera deliberada de mantener un sistema de poca transparencia y un sistema perverso de financiamiento partidario, que nos ha llevado a tener partidos políticos cooptados por estructuras que buscan beneficiarse y no beneficiar a la población», manifestó Sanabria.
UNA INSTITUCIONALIDAD FUERTE NO LES INTERESA A LOS CORRUPTOS
Mientras que Helen Mack, de la Fundación Mirna Mack, indicó que se ha podido comprobar a través de los casos de financiamiento electoral que esto “es el pecado original” porque es ahí donde se genera todo el clientelismo político y las plazas se van llenando dentro del Estado sin tener méritos, plazas fantasma, así como contratos que se dan por compromisos, entre otras dadivas.
“Y obviamente una institucionalidad fuerte a los corruptos nos les interesa, porque ya pueden manipularlo interponiendo recursos y evitar ser fiscalizados como ya lo vimos con la inconstitucionalidad presentada por CACIF por un lado y por el otro es estancar el tema de la reforma al delito de financiamiento electoral ilícito, los diputados no quieren resolver la reforma del 407N, es una prueba más que ellos no están dispuestos a ceder a esos actos de corrupción”, señaló la analista.
