Foto: Verdad y Justicia

Por Redacción La Hora
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Ayer durante la audiencia número cuatro del juicio por la desaparición del niño Marco Antonio Molina Theissen y las violaciones que sufrió su hermana, Emma Guadalupe Molina Theissen, pasó a declarar ante el Tribunal de Mayor Riesgo «C» el militar retirado Rodolfo Robles Espinoza, en su calidad de perito, informó CALDH por medio de un comunicado.

Rodolfo Robles Espinoza declaró las implicaciones de cada uno de los acusados en el caso, según su experiencia como general de división del ejército peruano.

El militar retirado explicó el funcionamiento del sistema de inteligencia militar en un ejército, en donde existen las operaciones de inteligencia y las operaciones espciales de inteligencia. Según Robles Espinoza, las primeras se enmarcan en una guerra convencional y sirven para aportar información al Estado Mayor y al sistema de inteligencia y las segundas son las que se realizan de manera secreta con personas entrenado para no dejar huella y evitar que se investigue a los autores. Señaló que en esta última se clasifica la desaparición forzada de Marco Antonio Molina Theissen.

Robles Espinoza explicó que Emma Guadalupe era considerada un cuadro importante para la inteligencia, debido a la documentación que llevaba al momento de su detención y su militancia en el PGT. Al momento de su fuga de la zona militar, el perito explicó que lo más lógico y adecuado era que el Coronel Zaldaña Rojas integrara el equipo que secuestró a Marco Antonio, porque la fuga representaba su falta y él tenía toda la información de Emma. Estos equipos no se integran con cualquier especialista ni podían operar sin autorización del G2.

Durante el interrogatorio del Ministerio Público, el perito explicó que los cinco militares sindicados tuvieron conocimiento de los hechos. «El jefe de inteligencia en la zona militar (Hugo Ramiro Zaldaña) le informa al Director Sección de inteligencia D2 (Manuel Antonio Callejas y Callejas), quien a su vez le informa a su superior el Jefe del Estado Mayor General del Ejército (general Benedicto Lucas García). El subcomandante de la zona militar (Edilberto Letona Linares) le informa al comandante Francisco Gordillo sobre los hechos, y éste a su vez eleva la información al Jefe del Estado Mayor General del Ejército (general Benedicto Lucas García); es decir, la información tuvo que haber llegado a Lucas García por dos vías», se lee en el comunicado.

Durante la audiencia también declaró Adriana Portillo, quien afirmó que el ejército de Guatemala desapareció a seis de sus familiares, entre ellas sus dos hijas de 9 y 10 años de edad.

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