Por Douglas Cuevas
dcuevas@lahora.com.gt
El 16 de enero de 2010 el cantautor español Enrique Bunbury tocó a la puerta de miles de corazones rotos con el tema titulado “Frente a Frente”, el que ejemplificaba una ruptura amorosa, “que poco queda de nuestro amor, apenas queda nada” es uno de los fragmentos de la letra de esa canción. Las relaciones sentimentales pueden terminarse, aunque podría no ser para siempre, pero cuando es así y en un matrimonio, debe cerrarse ese capítulo de manera legal y emocional.
Las estadísticas del Organismo Judicial (OJ), registraron un aumento en la cantidad de divorcios en los últimos años, ante esa realidad, dos psicólogos explicaron a La Hora las dificultades que enfrentan las personas para sobreponerse a la ruptura de un matrimonio y cómo es la mejor manera de hacerlo.
En 2013, el Centro de Información, Desarrollo y Estadística Judicial (CIDEJ) contabilizó 9,234 divorcios; para 2014, hubo una leve reducción a 9,109, pero en los siguientes tres años los números aumentaron, sumando en un periodo de cinco años, un total de 47 mil 530 divorcios.
En lo que va de 2018 se ha registrado 202 divorcios firmados por un juez.
PUEDE SER COSTOSO
“Aproximadamente en tres meses usted ya está divorciado”, explicó la abogada María Inés Ochoa, quien entre sus especialidades se encuentra el proceso de divorcio de parejas que probablemente se juraron estar juntos hasta que la muerte los separara.
La profesional detalló que hay dos vías para realizar una separación; la primera de ellas es la voluntaria, es decir, los dos quieren el divorcio, “las parejas optan más por el proceso voluntario porque no es tan desgastante ni económico, ni psicológico, tampoco para los menores que están en tutela”, explicó la abogada.
Pero el otro camino, donde alguna de las partes no desea la separación, es la vía ordinaria, un proceso que puede tardar años y representar costos económicos más onerosos para los involucrados.
Para el proceso voluntario, según Ochoa, los gastos podría oscilar en promedio entre los 5 mil quetzales, regularmente cada uno absorbe la mitad del pago. En tanto, un proceso ordinario la tarifa es más elevada.
“Hay abogados que cobran mil quetzales mensuales hasta que finalice el proceso, otros que cobran de 10 mil a 20 mil quetzales por plantear un divorció ordinario, 40 por ciento al inicio… 10 por ciento en fase intermedia y en la sentencia 50 por ciento”, todo depende de la firma de abogados, indicó la entrevistada.
“Por lo general se van al ordinario cuando no están de acuerdo con la repartición de los bienes. Por ejemplo, si tienen una casa y ella quiere toda la casa; el tema de la pensión que puede ser muy alta”, son algunos de los aspectos que inciden para que una pareja opte por un divorcio ordinario, manifestó la abogada.
Además, Ochoa menciona que en su experiencia en los procesos de divorcios, ha identificado dos situaciones comunes para que una relación termine: infidelidad y violencia.
“LA FIDELIDAD NO EXISTE”
Alejandra Orozco* es una mujer de carácter fuerte y con mucha franqueza al momento de hablar.
Apenas ronda por los 30 años, tiene dos hijos, y su relato se centra en el padre de su segundo hijo. Ella conoció a su pareja por medio de su primo, no fue amor a primera vista, en un principio no le gustó, recuerda.
“No me llamó la atención a primera impresión, él no era mi tipo no me gustaba. Pero vi que era un chavo que no se arreglaba, que no era tan guapo ni nada… entonces era, incluso, algo tímido, no hablaba; dije este si me va a ser fiel”, Alejandra se equivocó.
Ambos comenzaron una amistad que luego dio pie a una relación, las cosas iban muy bien, ella quedó embarazada. Alejandra se sentía feliz, ese hombre que al principio no le robo suspiros, sería el padre de su hijo y el esposo ideal, o por lo menos eso creía.
“Él lo tomo así como, a la gran se moría, juró y perjuró que nunca iba a tener un hijo entonces cuando se dio cuenta la primera semana no lo podía asimilar, hasta fiebre le dio, andaba nervioso… pero jamás me dijo no me voy a hacer cargo o no lo tengas, siempre me respondió bien”, recuerda.
“Cuando nació el bebé… yo de salir a trabajar y ser muy independiente y ser esa chava que siempre andaba arreglada, peinada, salones, uñas… a estar con un bebé, recién operada, encerrada… pues él feliz con su hijo, pero no dejaba de ir todos los sábados a jugar fútbol y regresaba hasta tarde de la noche”, relata.
La distancia entre ambos ocasionó peleas, además, descubrió una infidelidad cuando apenas tenía tres meses de embarazo.
“Luego de eso descubrí que ni lo feo, lo mal arreglado ni nada impide que un hombre sea infiel”, a pesar de esa traición ella no lo podía dejar, lo amaba demasiado.
“Yo no me sentía bien para irme a pesar de eso porque yo lo quería. Pero los problemas seguían, seguían y seguían y él me seguía mintiendo y yo alegando, él mismo mejor decidió irse”, añadió.
Ahora Alejandra retomó sus estudios universitarios, intenta tener un estilo de vida saludable practicando ejercicio, además de ser una madre dedicada y amorosa para sus hijos.
“Entre hombre y mujer la fidelidad no existe, siempre, siempre, siempre van a tener un besito o una salida a escondidas, a comer que no sea la pareja, para mí la fidelidad no existe”.
*El nombre de la persona que ofreció su relato a “La Hora” se cambió a petición de la entrevistada.
OTRO CLAVO NO SALVA UN CORAZÓN ROTO
Uno de los principales factores que inciden en las relaciones sentimentales es la codependencia, dependiendo del cariño, tiempo y atenciones que otra persona da para que nos sintamos a gusto, indica el doctor Marco Antonio Garavito, director de la Liga Guatemalteca de Higiene Mental.
“Normalmente las parejas en nuestra país no generan una independencia más allá de la pareja misma, yo he planteado muchas veces que una pareja exitosa y a largo plazo tenga que ver con que cada uno tenga sus amistades… un circulo propio”, señaló el experto.
“El amor debe de ser muy intenso, pero debe de haber un hábito de independencia emocional, cuando una persona abandona su círculo de amistades o familiares se vuelve hasta un apéndice de la pareja”, comentó.
La principal razón de esa codependencia es la falta de amor propio, las bases de la autoestima están mal, añadió Garavito.
El Director de la Liga de la Higiene Mental, advirtió que para afrontar un divorció lo más aconsejable es buscar el apoyo de amigos y familiares, y recalcó que la creencia popular de “un clavo saca a otro clavo” no es más que una trampa.
“Y muy peligrosa porque la ruptura de una relación debe de resolverse para establecer una nueva, sino lo que uno hace es reproducir esquemas que no ha logrado resolver en la relación anterior, porque ocurre con mucha frecuencia que una pareja que sustituye a una que se perdió guarda o comparte ciertos rasgos”, explicó.
BUSCAR SU MEJOR VERSIÓN
La mejor forma para superar un divorcio a criterio de la psicóloga María del Pilar Gracioso, es enfocándose en aquellas cosas que nos hacen sentir especial para evitar caer en una depresión.
“Hay que enfocarse mucho a sus fortalezas para encontrar sentido a su momento de vida y que eso le haga enfocarse en su autoestima, confianza y seguridad junto a todas esas posibilidades de sentirle éxito a la vida”, añadió la psicóloga.
“Enfocarse en aquellos elementos que le hacen considerar a sí mismo una persona de valía que tiene fortalezas”, comentó.
Los expertos de salud mental resaltan que tenemos que aprender que nada es para siempre, que todo va a cambiar en nuestra vida, y posiblemente si tenemos presente ese concepto, un divorcio o una ruptura emocional será posible superarla.
Independientemente cual sea su situación sentimental: casado, divorciado, viudo, soltero… la relación en la que debe enfocarse todos los días es en cuidar su corazón y su propio valor.
“Aproximadamente en tres meses usted ya está divorciado”, explicó la abogada María Inés Ochoa, quien entre sus especialidades se encuentra el proceso de divorcio de parejas que probablemente se juraron estar juntos hasta que la muerte los separara.
La mejor forma para superar un divorcio, a criterio de la psicóloga María del Pilar Gracioso, es enfocándose en aquellas cosas que nos hacen sentir especial para evitar caer en una depresión.
El Director de la Liga de la Higiene Mental, Marco Antonio Garavito, advirtió que para afrontar un divorció lo más aconsejable es buscar el apoyo de amigos y familiares, y recalcó que la creencia popular de “un clavo saca a otro clavo” no es más que una trampa.








