POR REDACCIÓN LA HORA
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Este lunes se reactivó el Caso Bancafé bajo dominio del Juez de Mayor Riesgo B, Miguel Ángel Gálvez, con la presentación para rendir primera declaración de Patricio Andrade Falla quien estuvo detrás de la fundación de Vipasa una de las entidades involucradas en la pérdida de US$ 150 millones y que afectó a 3 mil 336 cuentahabientes de Bancafé. Andrade Falla no había comparecido ante la justicia por estos hechos.
El Ministerio Público le imputa los delitos de caso especial de estafa en forma continuada e intermediación financiera. Según la imputación de la Fiscalía, ocupó cargos “muy importantes en los que tenía la capacidad de poder contactar clientes y tenía firma registrada en las cuentas del extranjero”. Andrade Falla ostentaba la calidad de director de mercados financieros y banca corporativa, señaló el fiscal.
La audiencia continuará mañana a partir de la 9:00 horas, en la cual se conocerá si se acepta la solicitud del MP para que sea ligado a proceso.
Andrade Falla permanecía prófugo de la justicia desde 2011, cuando se giró una orden de captura para compareciera por este caso. Hoy se presentó ante la judicatura para la audiencia de primera declaración.
La Hora publicó una serie de reportajes entre septiembre y noviembre del año pasado, en los cuales se relató que a mediados de los 90, Andrade Falla descubrió que la bolsa rusa era altamente rentable y le propuso a Manuel Eduardo González Castillo, presidente de Bancafé, invertir en ella por medio de Vipasa. Sin embargo, la Casa de Bolsa se financiaba exclusivamente con el dinero de los cuentahabientes de Bancafe International Bank (BIB) y en principio González Castillo fue aprehensivo por tratarse de una inversión de alto riesgo. Por lo que Andrade comenzó a invertir, con éxito, fondos de particulares y luego colocó los recursos de Vipasa.
En 1997, las ganancias superaron cualquier expectativa, pero en 1998 el rublo se devaluó y esto provocó grandes pérdidas para los inversionistas de todo el mundo. Según González Castillo, Vipasa perdió US$12 millones, sin embargo, los investigadores aseguran que fueron más de US$25 millones.
Bancafé absorbió toda la pérdida de sus clientes para evitar un riesgo reputacional. Por esa razón, tampoco registró la pérdida en su contabilidad y así evitó manchar sus estados de cuenta. Como Vipasa sólo se alimentaba con recursos de BIB, fueron los cuentahabientes de la offshore quienes pagaron la deuda sin saberlo.
Los bonos rusos fueron tan solo el primer traspié. El Grupo Financiero Del Pais (GFP) perdió en otras operaciones y en otros mercados, y cuando cerró el banco la deuda sumaba US$26.2 millones.
