Por Douglas Cuevas
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La investigación preliminar contra el alcalde Álvaro Arzú no es el primer caso contra municipalidades que investiga el Ministerio Público (MP) en conjunto con la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG). Uso personal de los fondos comunales y hasta vínculos con el narcotráfico de algunos jefes ediles han revelado los primeros indicios, pero las acciones legales han ido retrasando las acciones.
En septiembre de 2012 fue capturado el entonces alcalde de Antigua Guatemala, Rodolfo Vivar, por señalamientos de las autoridades por la sustracción de más de 20 millones de quetzales. Agentes del MP estiman que Vivar ha presentado más de 20 acciones legales entre amparos, apelaciones y recusaciones.
Otro exacalde procesado por múltiples casos de corrupción es Arnoldo Medrano, quien ocupó la silla edil por 20 años en el municipio de Chinautla, tiempo que utilizó para “cooptar” el municipio dando puestos de trabajo y adjudicando proyectos a empresas de su familia.
El pasado jueves fue entregado el expediente contra familiares del exalcalde del Puerto de San José, Jorge Rizzo, a quien autoridades identifican con un sistema de “narco política”.
Rizzo habría usado la municipalidad para el lavado de Q44 millones provenientes del narcotráfico y actualmente está ligado a proceso. pero no por este expediente. Recursos presentados en distintas cortes han impedido citarlo para audiencia de primera declaración.
